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horacio.jimenez@eluniversal.com.mx
El ex secretario del Trabajo y Previsión Social e integrante del equipo de Rafael Moreno Valle, Javier Lozano Alarcón, afirma que una vez concluidas las elecciones de junio próximo, Ricardo Anaya Cortés debe definir si buscará la Presidencia de la República y, de ser así, dejar la dirigencia del PAN, pues alerta que de no hacerlo hay riesgo de graves fracturas en el panismo nacional.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Lozano Alarcón dijo que si Anaya Cortés busca la Presidencia y se mantiene como líder del PAN, va a generar una gran tensión en la Cámara de Diputados, el Senado, en los gobiernos locales y a provocar posiciones cada vez más radicales entre el panismo.
Destaca que si Anaya Cortés decide no competir por la candidatura presidencial de Acción Nacional, debe ser un buen árbitro y conducir bien la contienda interna. Le pide congruencia, sensatez, disciplina y generosidad “para que tengamos el mejor resultado”.
El senador con licencia y vocero del gobierno de Puebla, ve que la contienda interna sólo será entre tres: Margarita Zavala Gómez del Campo, Rafael Moreno Valle y Ricardo Anaya Cortés. Propone que pasando las elecciones haya debates internos para que el panismo sepa “quién es quién”.
Lozano Alarcón, quien considera a Moreno Valle como la mejor opción para 2018, pide que le perdonen sus expresiones, pero desde su opinión, el PAN “solo no ganaría la Presidencia de la República en 2018”, puesto que el blanquiazul tiene que ir en alianza con cualquiera de las fuerzas políticas, incluido el PRI, pero no Morena.
¿Cómo ve al PAN después de este Consejo Nacional en que hubo diferentes expresiones importantes y un ríspido debate?
—Por un lado, es una expresión de un partido democrático, si fuera un partido autoritario, ese tipo desahogos no se dan, se dan porque hay libertad de expresión, hay democracia, hay efervescencia, hay procesos internos y se vive con mucha pasión la política dentro de Acción Nacional. Ahora, pienso que fue muy desafortunado, precisamente, por los arranques y desbordamientos que tiene este señor Rodríguez Prats, que haya insultado al ex presidente Felipe Calderón con tantas mentiras y con tantos insultos y con tantas bajezas, y eso fue lo que más trascendió en una reunión de uno de los máximos órganos de gobierno de mi partido, que es el Consejo Nacional. Entonces, lamentable, que se haya desviado por ese lado o por otro, no nos debe de extrañar que haya debate, porque es un partido de debate, de ideas, de valores, de mucha discusión, de democracia interna, y bueno, pues en sentido tampoco nos debe de espantar, es parte de la esencia del PAN.
¿Usted ve una lucha encarnizada por la candidatura presidencial?
—Sí, sí veo que hay una lucha, particularmente, entre tres, entre Margarita Zavala, Ricardo Anaya —aunque lo niegue— y Rafael Moreno, aunque se ha apuntado de manera tibia por ahí Ernesto Ruffo y recientemente Romero Hicks, que creo que va a ser un poco más testimonial su participación, pero veo básicamente estos tres punteros y, bueno, los tres están destinados para buscar esa candidatura, aunque yo diría que esto…, en mi opinión, yo lo he expresado públicamente, Moreno Valle, que es el menos conocido, está creciendo y ya se dedica de tiempo completo al asunto, pues es el que tiene acreditada una mejor trayectoria y una mucho mayor experiencia en el gobierno. Pero, bueno, Ricardo es un joven muy talentoso; Margarita es una mujer muy carismática, y bueno, los tres están destinados a buscar esa candidatura, quizás lo que está haciendo más ruido es que uno de los aspirantes es a la vez juez y parte, quien tendría que ser árbitro también está convirtiéndose en jugador y eso está generando cierto conflicto y ruido, pero, bueno, yo espero que pronto lo resolvamos, creo que pasando las elecciones de junio nos van a presentar un panorama a partir del cual hay que mover bien las piezas con inteligencia hacia 2018. Yo siempre he dicho una cosa, desde el año pasado, cuando ganamos ocho elecciones, yo sentí que hubo un exceso de soberbia y de confianza, parecía que ya de manera natural ganábamos la Presidencia en 2018, cuando la verdad es que no hubo una reflexión profunda de que más que haber ganado el PAN, perdió el PRI, uno, y dos, que en automático no te abre una Presidencia, que todavía faltaba el ejercicio del gobierno y no es lo mismo ser borracho que cantinero, no es lo mismo ser crítico y oposición, a ser ya el gobernante y la gente te va a evaluar por tus resultados del gobierno.
Entonces, por eso digo que tenemos que ser buenos gobiernos en Acción Nacional, para que se refrende esa confianza y, entonces, tengas fuerza para llegar a 2018, pero todavía falta un rato y por eso yo creo que los gobiernos locales tenemos que hacer muy buena labor para que la gente siga creyendo prioritariamente en el PAN.
¿Desde su perspectiva, entonces, cree que hay soberbia en el PAN?
—Bueno, la hubo. Yo creo que ya hay menos, yo creo que ya nos dimos cuenta de que no era inercial meramente después del triunfo de junio del año pasado, que las cosas no iban a darse solas, sino que hay que hacer mucho trabajo de gobierno y político para mantenerse en los primeros lugares de las preferencias electorales. Y creo que el error que se ha cometido es no darse cuenta de que hay que concentrarse en hacer buenos gobiernos y, segundo, identificar muy bien dónde está el adversario o el enemigo a vencer. El enemigo a vencer ya no es el PRI histórico, ese PRI está desmoronado precisamente… su regreso al gobierno fue lo que ha pasado, pues la gente, ya hay un rechazo natural. El problema y el peligro verdaderamente se llama Morena, todo Morena, no solamente López Obrador, todo Morena. Es el cúmulo de hipocresía, de corrupción, de falta de buenos resultados en gobierno y de un sentimiento o un resentimiento hacia la política pública que nos puede llevar a escenarios como el de Venezuela.
Entonces, yo si pienso que a veces estamos desviando o equivocando la puntería y que sí ha habido un exceso de confianza. Bueno, pues ya vemos que en el Estado de México no estaban tan sencillas las cosas, entonces, más nos vale ponernos a trabajar, dar buenos resultados y mantenernos unidos, con mucha generosidad y mucha disciplina para que, más allá de afanes estrictamente personales o individuales, pensemos colectivamente en el bien común, en el ejercicio del gobierno, pero también en el partido para escoger a las mejores y a los mejores en las posiciones que vienen, porque van a ser muchísimos puestos los que van a estar en disputa en 2018 y hay puestos para todo mundo, siempre y cuando sepamos actuar con generosidad y con inteligencia, con estrategia, con disciplina y con generosidad.
Para resumir, ¿hay soberbia y no está ganada la Presidencia, sino se necesita hacer mucho trabajo?
— Así es. Y, además, que me perdonen, pero el PAN solito, no gana la Presidencia. El PAN tiene que ir en alianza con otras fuerzas políticas y si no entendemos eso, estamos equivocándonos. Entonces, hay que concentrarnos más en lugar de estarle pegando todos los días al PRI, que tienen sus cosas y que obviamente hay que seguirlas señalando, pero nosotros somos gobierno en una gran cantidad de entidades y ahí tenemos que demostrar que somos mejores. Tenemos que entender que el adversario a vencer se llama Morena y que no podemos pelearnos internamente porque entonces llegamos debilitados, y en esa estrategia de despedazar el voto y de diseminarlo entre cinco candidatos, pues la verdad es que ahí es donde se va a colar Morena, que, además, sin ningún tipo de desgastes, qué desgaste puede tener si no gobiernan en ningún lado. Nada más se dedican a criticarnos, a criticar al PAN y al PRI para ver quién es más corrupto, quién es más inepto…. Y nos seguimos tirando entre nosotros y el otro, muerto de la risa, como el INE, además, no le hace nada por actos anticipados de campaña todos los días.
Entonces, sí creo que no podemos pensar que tenemos la Presidencia en la bolsa, hay que ir por ella, hay que ganarla y para llegar a 2018, primero pasemos por 2017, eso implica ganar las elecciones de junio y, dos, hacer buenos gobiernos, porque si no nos van a decir que salimos retebuenos para (inaudible), pero malos para gobernar y no nos podemos dar esos lujos.
¿Una alianza, estamos hablando del PRD o de otros partidos?
—De los partidos con los que se pueda uno poner de acuerdo. Siempre he pensado que México debería tener una segunda vuelta, fue lo que escribí del Plan B en EL UNIVERSAL. A la falta de una segunda vuelta deberíamos tener sistemas de gobierno de coalición obligatoria, pero si ya no tenemos eso hay que hacerlo de facto y todos cabemos, solamente encontremos un buen candidato o candidata que nos sea cómodo a todo mundo y que ese pueda perfectamente representar o encabezar un esfuerzo de un buen gobierno de coalición, con un reparto inteligente de posiciones con la capacidad necesaria para ocupar las carteras y lo mismo en el parlamento, diputados y senadores, que nos den en la suma mayorías estables para sacar adelante las reformas y entonces así sí le ganamos, no solamente a López Obrador, sino a la bola de farsantes que lo rodean.
¿La alianza no sería con Morena?
—No, nunca. Todos menos Morena, incluido el PRI, esa es mi visión.
Fernando Canales le pide a Ricardo Anaya que si va a buscar la Presidencia debe renunciar el 5 de junio, ¿ustedes como integrantes del equipo de Rafael Moreno Valle también se suma a este llamado?
—No sé si el 5 de junio, o qué día, pero pasando las elecciones él tiene que tomar una decisión, si va a buscar la Presidencia de la República se tiene que hacer a un lado de la presidencia del partido y sobre todo si los resultados no son los óptimos. Que tome una decisión porque no se vale ser juez y parte.
Qué futuro le vislumbra al PAN si Anaya no toma la decisión a tiempo, ¿hay riesgo de fractura?
—Pues sí, sí él de verdad está buscando la Presidencia de la República y se mantiene como presidente del partido, yo sí creo que va a haber una tensión muy grande, y esa tensión se va a sentir en todos lados, en la Cámara de Diputados, en la de Senadores, con los gobiernos locales, y eso va a obligar a asumir posiciones cada vez más radicales de mucha gente.
¿Cómo ve a Moreno Valle?
—Bien, crece y crece. Él estaba muy concentrado en su trabajo en Puebla, sacando buenos resultados y se fue a dar la vuelta por el país. No lo conocen, con su libro se deja ver, se deja querer y la gente dice: “Sí, es una opción”, y esto viene a enriquecer muy bien esta discusión interna que tenemos en el PAN.
Lo que pienso es que sería sano para el partido es que pasando las elecciones de junio tengan algunos debates internos, que haya debates entre los aspirantes y para que el panismo pueda saber quién es quién, cómo se desenvuelven, cómo responden, qué proponen, qué plantean mediante foros.