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carina.garcia@eluniversal.com.mx
Los consejeros electorales salientes Javier Santiago Castillo, Beatriz Galindo Centeno y Arturo Sánchez Gutiérrez consideran que el desorden en presupuestación, la burocracia y el exceso de atribuciones son temas que el Instituto Nacional Electoral (INE) debe superar.
En un balance para EL UNIVERSAL de su paso por el INE y de los retos del instituto, Santiago Castillo propone terminar con el desorden en la presupuestación y con inercias que “tienden a la burocratización y a mantener espacios de confort”.
Galindo Centeno opina que el INE está preparado para atender y resolver lo que se anticipa como una alta judicialización, conocida también como “guerra sucia” en el megaproceso electoral de 2018.
Dice que en un futuro sería deseable quitar al instituto la atribución legal para resolver quejas y denuncias de partidos y candidatos, pues atenderlos ha sometido a presión al organismo. Señala que retirar esa facultad “despresurizaría la politización que existe en el INE al llevarse esos procedimientos a los tribunales”.
Sánchez Gutiérrez comenta que para la organización de las elecciones presidencial, legislativas y más de 30 comicios locales en 2018 el instituto está preparado, pero sobre el comportamiento de los actores políticos lo peor sería desconocer el resultado o descalificar a la autoridad.