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En las próximas elecciones habrá una “emergencia de candidatos desechables que va a traer consigo gobiernos desechables” y creados en parte sólo por su popularidad en redes sociales, previó Francisco Guerrero, secretario para el Fortalecimiento de la Democracia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El funcionario dijo, sin citar casos concretos, que en México hubo candidatos y gobiernos desechables, “estamos viendo casos donde hubo una gran popularidad a través de las redes o de un planteamiento alternativo que cuando se enfrentan a la realidad del gobierno te das cuenta de que no hay manera de que ese modelo de gobierno sobreviva”.
Al dictar la conferencia Democracia y Redes Sociales ante magistrados del TEPJF, pidió a los magistrados “mejorar la calidad de la intermediación democrática con ciudadanos modernos”, como son los millennials, a través de la comprensión de las redes sociales, su uso para acercarse a los ciudadanos y el reconocimiento de su poder.
Esto sería difícil, aceptó, pues “todos los abogados crecimos con el mantra de los tres poderes” y que todo circulaba en torno a ellos.
“Sin embargo, hay cambios y el número de poderes fácticos ha aumentado y me atrevería a decir que Facebook y Twitter son un poder fáctico o de gran influencia fáctica”, expresó.
Guerrero Aguirre planteó que un caso representativo es el de la joven Dafne, en el que el amparo concedido a uno de los Porkys (Diego Cruz) desató una inconformidad “tan brutal y tan inmediata” que el Consejo de la Judicatura tuvo que intervenir y se retoma por los medios tradicionales.
Es obligación del Poder Judicial tener una política inteligente de redes sociales, pues son —insistió— una muestra de “democracia digital sin intermediarios”.
“Si las instituciones no reconocen que su nivel de desconexión y de descrédito es tan grande vamos a enfrentar niveles de gobernabilidad severos”, aseveró.
Ante juzgadores electorales de todo el país, el funcionario internacional indicó que esta revolución digital tiene a todos en una nueva circunstancia, pues “han democratizado los espacios de participación.
“El resultado es que tenemos un nivel de pluralismo muy elevado, caótico” y en él, previó, “la democracia dependerá más del networking”.
Además avizoró que convocatorias en Facebook contra sentencias judiciales (como el caso de Los Porkys) pueden constituirse en un mecanismo de comunicación nuevo de los ciudadanos on line, conectados a su fuente todo el tiempo”, lo que no significa que la red “no esté llena de fake news”.
Las redes, anticipó, “pueden generar una demanda brutal de justicia y de activismo”.