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La ratificación de Jaime Rochín del Rincón como titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) generó una discusión, en la que el PAN descalificó su designación cuando había encabezado el organismo sin resultados positivos y sus senadores pidieron tiempo para votar el dictamen en comisiones.
De hecho, tras su presentación ante las comisiones de Gobernación, Justicia y Derechos Humanos, la votación del dictamen sobre la designación de titular de la CEAV tuvo que ser pospuesta para la próxima semana, por la falta de quórum, originado por el retiro de senadores priístas a una actividad en la sede del PRI.
Rochín del Rincón presentó aspectos de un programa de trabajo, y ante las críticas al organismo y a su designación dijo que el reto de encabezar en su nueva etapa a la CEAV consiste en obtener legitimación, y que esta institución sea bien vista y así pueda apoyar la situación de la gente que sufre la violación de sus derechos humanos.
En comisiones, Rochín compareció para alcanzar la ratificación del Senado a su nombramiento que le extendió el Ejecutivo para encabezar la CEAV por tres años, y escuchó cuestionamientos de legisladores de oposición.
Rochín afirmó que pondrá atención a los señalamientos de los grupos que se opusieron a su designación, e incluso Angélica de la Peña (PRD) hizo hincapié en que se habían expresado en contra de su nombramiento grupos a los que no recibió en ninguna oportunidad, a lo largo de un primer periodo al frente de la comisión.
Las comisiones volverán a reunirse el martes próximo, a fin de votar el dictamen de Rochín, y se considera que recibirá votos a favor del PRI, PAN, PVEM, y algunos en contra de Acción Nacional y del PRD. En el pleno requerirá de dos tercios de la votación en cédula, y en ese caso pararía a rendir protesta ante la asamblea senatorial.
La presidenta de la Comisión de Gobernación, Cristina Díaz (PRI), informó que en la consulta pública que realizó el Ejecutivo antes de enviar al Senado el nombramiento de Rochín, el abogado recibió apoyo mayoritario de organizaciones de la sociedad civil y expertos, esto es, 131 propuestas de 283 emitidas para varios candidatos.
Rochín expuso que “la CEAV tiene el mandato de ser la respuesta tangible del Estado mexicano ante una situación de urgencia nacional”, y esta misión “es una responsabilidad histórica de reconciliación nacional”.
El organismo “debe convertirse en la manifestación más tangible de los esfuerzos del Estado por remediar el daño que han sufrido las víctimas”.
La panista Adriana Dávila criticó que un organismo que falló en sus objetivos sea refundado con la misma gente en su dirección, y los albiazules pidieron tiempo para razonar el sentido de su voto.