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Expertos y académicos especialistas en temas de seguridad, urgieron al Congreso de la Unión una Ley de Seguridad Interior que dote de certidumbre jurídica en caso de que las Fuerzas Armadas continúen, como desde hace 10 años, en labores de seguridad pública por la ineficacia de las corporaciones policiacas en el país.
En la segunda reunión de trabajo para la expedición de una Ley de Seguridad Interior, realizada por la Comisión de Gobernación de la Cámara de Diputados, la diputada presidenta de dicha comisión, Mercedes del Carmen Guillén, adelantó que en febrero se tendrá listo el dictamen y será aprobado en el periodo ordinario de sesiones.
En la reunión de trabajo, la que el PRD abandonó bajo el argumento de que no se incluyó su propuesta de expertos, el punto que hasta ahora quedó claro, según Guillén, es que las Fuerzas Armadas no serán utilizadas para controlar disturbios ni en manifestaciones.
En su ponencia, Juan Velásquez, uno de los abogados penalistas más reconocidos de México, resaltó que las Fuerzas Armadas actúan obligadamente en la seguridad pública porque ésta amenaza a la seguridad interior, y existe una falta de autoridades civiles que enfrenten a la delincuencia organizada.
Expuso que México tiene una de las 10 policías menos eficientes del mundo, la más ineficiente de América Latina, la segunda más corrupta y 75% de los cuerpos policiacos están infiltrados por la delincuencia.
“Por eso se ha encargado a militares la preservación de la seguridad pública, pero sin un marco regulatorio. Se ha sacado a militares de los cuarteles para que malamente la hagan de policías”, expuso.
Aclaró que la Ley de Seguridad Interior no debe crearse para proteger a las Fuerzas Armadas, sino que para que haya una corresponsabilidad de todos los actores del Estado.
Para Elías Huerta Psihas, doctor en Derecho por la UNAM, es preocupante el tema de la seguridad en el país. Asimismo, apoyó la iniciativa del PRI en San Lázaro de delimitar las acciones de las Fuerzas Armadas en el territorio, pero que no se utilicen para el control de manifestaciones o disturbios internos.
“El tema aquí es que [las Fuerzas Armadas] no sean una súper policía con funciones de súper policía, sino que deben estar ahí donde se les ubica constitucionalmente”, dijo.
María Leoba Castañeda Rivas, catedrática de la UNAM e investigadora del Conacyt, resaltó que las Fuerzas Armadas tienen 10 años de estar violentando la Constitución, desde que en 2006 se les permitió realizar labores de seguridad pública. Expuso que la creación de una Ley de Seguridad Interior es una oportunidad histórica.
Para Juan Ibarrola Carreón, experto en temas de seguridad, ese rubro es un pendiente de gobernadores y alcaldes, por eso “creo urgente una ley de Estado que nos dé la oportunidad de reinventarnos.
“Las Fuerzas Armadas son la única opción que tenemos los ciudadanos para coadyuvar con autoridades civiles. Los gobernantes permiten que este país se militarice, porque son la única opción al problema”, agregó.
Javier Oliva Posada, investigador de la UNAM, advirtió que el mal uso de las Fuerzas Armadas puede dañar la estabilidad del Estado Mexicano. Coincidió en que hay una crisis en las corporaciones de policías.
Para Jorge Chabat, Profesor de la División de Estudios Internacionales del CIDE, en 2006 se pensó en la idea temporal de usar las Fuerzas Armadas para seguridad, pero se ha llegado a un desgaste debido a que la policía no ha funcionado bien. “Los Estados tienen una forma cómoda de eludir sus responsabilidades en materia de seguridad”, indicó.
