Con la noticia de su renuncia al Banco de México, Agustín Carstens pegó un jonrón contra el peso, a pesar de que la salida se hará efectiva el primero de julio de 2017, para salir del país e ir a la gerencia general del Banco de Pagos Internacionales en Suiza.
¿No previó don Agustín, aficionado y jugados amateur de beisbol, que con el anuncio anticipado iba a darle un batazo a la moneda nacional?
Tal parece que no y a unos minutos del anuncio el peso comenzó a caer frente al dólar, moneda que de trancazo ganó 20 centavos, nos hacen ver.
El jonronero Carstens obligó al gobierno federal a concentrar a su equipo en el dugout. Y el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, trató de calmar las ansias del respetable público.
Por la noche, nos comentan, el presidente Enrique Peña Nieto dirigirá un mensaje a la nación con motivo del arranque de su quinto año de gobierno.
¿Dirá algo de la renuncia del pelotero Carstens?