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En una sesión exprés, los cuatro magistrados seleccionados para ampliar sus periodos y los tres nuevos, todos votados por el Senado, eligieron como presidenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), para los próximos cuatro años, a la magistrada Janine Madeline Otálora Malassis.
Ellos serán los encargados de calificar las posibles controversias en la elección presidencial de 2018.
En punto de las 17:26 horas de ayer se declararon iniciados los trabajos de los nuevos integrantes de la Sala Superior, para después votar por unanimidad —como único registro— a la magistrada Otálora Malassis como la presidenta del TEPJF.
Entre los nombramientos del Senado, la nueva presidenta fue la única designada por consenso y aunque su encargo al frente del TEPJF será de cuatro años, su nombramiento como magistrada alcanzará hasta el año 2025; es decir, nueve años.
La magistrada Mónica Aralí Soto Fregoso, así como los magistrados Felipe de la Mata Pizaña, Felipe Alfredo Fuentes Barrera, Indalfer Infante González, Reyes Rodríguez Mondragón y José Luis Vargas Valdez, votaron a favor de la única propuesta sometida a votación en el pleno. La nueva formación del TEPJF calificará la elección de presidente de la República en 2018.
En su primer discurso, la magistrada garantizó que el TEPJF será un tribunal transparente y abierto a todos los actores políticos y todas las personas que busquen solución a sus conflictos electorales.
“Seremos abiertos a todos los actores políticos y, en general, a todo aquel que acuda a nosotros en busca de solución para un conflicto electoral o de protección de sus prerrogativas ciudadanas básicas. Sabemos que nuestro actuar es un eslabón que permite que los procesos electorales concluyan en el marco de la ley”, dijo en el pleno.
Aseguró que la designación de los nuevos magistrados tiene como propósito contar con perspectivas nuevas que enriquezcan el servicio público.
“La única manera de acercar la justicia a los ciudadanos y permitir que deje de ser una nebulosa reside en sentencias claras, breves, razonables y fundadas”, añadió la magistrada.
A nombre de sus compañeros, dijo que el TEPJF está listo para cumplir con su función sustantiva de brindar estabilidad y racionalidad al sistema democrático, mediante la resolución de las controversias según criterios estrictamente jurídicos.
“Al ciudadano le corresponde la definición de quiénes deben gobernarlo. Al Tribunal Electoral le compete garantizar que esa voluntad no se tergiverse ni se altere”, destacó.
Críticas. La semana pasada los magistrados convocados a rendir protesta fueron declarados integrantes del TEPJF para periodos de tres y seis años. Con el cambio, que repudiaron parte de la oposición y organizaciones civiles, se calificó como “Ley de Cuates”, los periodos aumentaron a siete y ocho años, respectivamente.
Previo a la sesión de ayer, el presidente del Senado, Pablo Escudero (PVEM), tomó la protesta a José Luis Vargas Valdez e Indalfer Infante González, magistrados de siete años. De ocho años son Felipe Alfredo Fuentes y Reyes Rodríguez Mondragón.
Con una rapidez sin antecedente en el Congreso, fue reformada la ley en ambas cámaras —con dispensa de trámites que reprobó la oposición, que advirtió que promoverá acciones de inconstitucionalidad.
A la prontitud de acción se sumó el Ejecutivo, que firmó el decreto y el Diario Oficial de la Federación (DOF) lo imprimió en cuestión de dos horas después de salir de la Cámara Baja.
Escudero dio lectura a un acuerdo parlamentario para dar cumplimiento al decreto de reforma al artículo cuarto transitorio de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, y que se publicó en una edición vespertina del DOF, el jueves pasado.
El pleno aprobó el sustento jurídico, sin intervenciones de ningún legislador, pese a que al ser aprobado y remitido a la Cámara de Diputados hubo un debate de desaprobaciones en las que surgió el señalamiento de que en las asignaciones de magistrados había reparto de cuotas. Finalmente, Pablo Escudero llamó a los cuatro magistrados seleccionados a rendir protesta a sus periodos ampliados.
