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El coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Marko Cortés, reprobó el aumento que registrarán las tarifas eléctricas a partir de este 1 de noviembre.
Dijo que los incrementos de 3.3% a la tarifa de uso doméstico de alto consumo; de entre 5.6% y 7.2% para el sector industrial, y de entre 3.3% y 5% en el sector comercial afectarán el bolsillo de los más necesitados, además de provocar una escalada de precios.
“Lamentamos la falta de sensibilidad del gobierno para apoyar la economía de miles de familias que viven al día y con trabajos pueden pagar su luz”, dijo.
El legislador lamentó que el gobierno del presidente Peña Nieto “no haya podido todavía administrar e implementar la reforma energética en favor de la población”.
Criticó que tanto el PRI como el gobierno federal le hayan “mentido una vez más a los mexicanos”, al decir que no habría incrementos.
Urgió al gobierno a cambiar la política económica del país y tomar en cuenta las 24 propuestas económicas del Partido Acción Nacional que buscan el crecimiento económico y mejorar las condiciones de las familias mexicanas.
El sábado pasado la Comisión Federal de Electricidad (CFE) anunció incrementos a las tarifas, debido al comportamiento de los combustibles que se usan para generar energía eléctrica, como el gas natural, cuyo precio creció 50.8% en octubre, con respecto al mismo mes del año anterior.
En un comunicado, explicó que pese al incremento en el precio del gas natural, “el combustible sigue siendo 40% más barato y menos contaminante que el combustóleo en los procesos para la generación de electricidad”.
En agosto la CFE anunció que se incrementarían las tarifas por segunda ocasión para los sectores industrial y comercial, así como el uso doméstico de alto consumo.
Las tarifas industriales subieron entre 5.2% y 7.5% en agosto, en comparación con el precio que estuvo vigente en el mismo mes de 2015; las tarifas comerciales se ajustaron al alza entre 7.8% y 9% durante el mismo periodo. Las de uso doméstico de alto consumo registraron un aumento de 8.9%.
Desde julio la CFE ha argumentado que el ajuste de las tarifas “está relacionado con los incrementos de los combustibles para generar energía eléctrica”, como el gas natural, el cual es el principal carburante para la operación del parque de centrales generadoras.
