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La acción de inconstitucionalidad de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a favor del derecho de adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo carece de sustento científico, dijo Fernando Pliego Carrasco, investigador del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, en el Senado, durante los trabajos de un foro en el que legisladores federales y constituyentes de la Ciudad de México asumieron una postura a favor de la familia heterosexual.

Fernando Pliego Carrasco, director del programa de investigación sobre la familia, basado en más de 350 estudios de 13 países democráticos, dio cuenta de la situación de distintos tipos de familia, con variantes en los cuales se muestra que las parejas hombre-mujer que viven casadas y con hijos propios reportan mayor bienestar.

En cambio, el cruce de la información de los más de 350 estudios que ha recopilado arroja que los hijos de parejas del mismo sexo, respecto a quienes de niños tuvieron papá y mamá biológicos, reportan más experiencias de abuso sexual, pensamientos suicidas y alguna vez contrajeron enfermedades de transmisión sexual.

Las familias heterosexuales, agregó, tienen bienestar en los rubros de educación, seguridad física, relaciones padres-hijos, en funcionamiento de la pareja, salud sexual y reproductiva, y salud mental, en rangos que van de 72 y casi 95 puntos de cien posibles. Destacó que eso genera estabilidad en los integrantes de la familia.

Al participar en el Senado, en el foro Importancia de la institución familiar en México, la diputada Aída Arregui Guerrero (PES) llamó a defender a la familia en el proyecto de Constitución para la Ciudad de México.

Señaló que la familia integrada por hombre, mujer e hijos es el espacio en el que se educan las personas en principios y valores que pueden ayudar a tener un mejor ciudadano para la sociedad.

La diputada dijo que su grupo se opondrá a que en la Constitución local se incluya que los niños, “si quieren ser niñas, lo sean, aunque hayan nacido niños”, y ese es un derecho de la niñez que se quiere incluir, para parecer que somos una ciudad progresista”.

La presidenta de la Comisión de la Familia del Senado, Lisbeth Hernández Lecona (PRI), indicó que diversas problemáticas se cruzan en el espacio de la familia, como la maternidad subrogada, reproducción asistida, regulación y legalización de la marihuana, así como el aumento del gramaje y su uso medicinal, la trata de personas, el abuso infantil, la pornografía, abuso sexual, los embarazos en mujeres adolescentes y las adicciones.

Hernández Licona señaló que “en la medida en que las familias no cumplen sus funciones básicas, surgen de ellas individuos con más carencias sociales, emocionales y morales”.

Pliego Carrasco explicó que entre los países en los que recabó estudios sobre la familia figuran, además de México, Estados Unidos, Canadá, Chile, Colombia, España, Australia, Holanda, Japón, Noruega y Reino Unido, entre otros.

Indicó que las parejas del mismo sexo conforman de 0.15% a 1.22% de los hogares, de modo que en las sociedades democráticas, las relaciones hombre-mujer determinan el bienestar de los países.

Pliego Carrasco subrayó que no existe información científica que demuestre semejanzas funcionales entre las parejas formadas por hombre y mujer, y las parejas del mismo sexo. “Tampoco hay estudio alguno que diga que a los niños les da lo mismo vivir con papá y mamá o con parejas homosexuales”, señaló.

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