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Politólogos advirtieron que la licencia que pidió el gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, para dejar el cargo y enfrentar las acusaciones por presunto desvío de recursos es una estrategia, porque el priísta sabe que el gobierno federal procederá penalmente en su contra.
José Antonio Crespo, politólogo e investigador del CIDE, aseguró que es parte de la estrategia de Duarte para defenderse, al considerar que no tenía mucho sentido permanecer el tiempo que le falta para terminar la gubernatura o “quizá está planeando emprender la fuga como se sospecha”.
“Lo que sería muy peligroso, políticamente hablando para el gobierno federal, pero si está viendo que está todo en contra de él, no sería raro que intente irse”, explicó.
Crespo consideró que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto va en contra del gobernador. “Él lo sabe, por ello su estrategia, ya sea para defenderse o para escapar. No lo sé. El gobierno federal va en serio contra Duarte”, advirtió.
Dijo que no se puede considerar que esta decisión de legitimidad al PRI frente a los comicios de 2018, pero es mejor que tome cartas en el asunto a que no haga nada.
“Es mejor que haga esto a que no haga nada, pero no creo que sea suficiente para que el PRI remonte para 2018. La gente podría decir qué bueno [que lo detuvo], pero en la medida en que solo se quede en Duarte, ese es un efecto contrario, porque hay otros que están bajo sospecha.
“¿Por qué protegen a los Moreira? ¿Qué pasa con el ex gobernador de Chihuahua, César Duarte?, es decir, debería ser mucho más amplia esta decisión, no sólo concentrarse en Javier Duarte”, detalló.
Para el ex presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, el anuncio del gobernador de que pedirá licencia para enfrentar las acusaciones en su contra, significa que la presión está fuera de control y no le quedaba otra opción.
“La pregunta será si esta decisión fue negociada con el gobierno federal o por iniciativa propia, pero el mandatario prevé que van a solicitar una orden de aprehensión pronto en su contra, una solicitud de desafuero y eso significa más escándalo”.
Ugalde afirmó que ante ese escenario el mandatario se adelantó, porque sabe que el gobierno federal lo está investigando y quiere detenerlo.
“Para el gobierno federal, simbólicamente, es importante hacerlo [detenerlo] y hacerlo pronto”, señaló.
Aseguró que en la actual coyuntura no se puede decir que esta decisión legitima al PRI con los ciudadanos de cara a los comicios de 2018.
“Si no lo hace, el gobierno federal seguirá asumiendo el costo creciente en términos de confianza, ahora que si lo hace no sé qué efecto pueda tener: o la gente le da el beneficio de la duda al gobierno y dice ‘¡Ah, caray! Ahora sí van en serio’ o hay una respuesta de incredulidad al decir: ‘Esto es una simulación’ y eso no le ayuda en nada”.
El también académico del ITAM explicó que si el gobierno federal no actúa en contra de Duarte dejará la vía para que el gobernador electo Miguel Ángel Yunes, eventualmente, lo hubiera podido procesar penalmente.
El profesor investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), Nicolás Lazo, consideró que la separación del cargo de Duarte de Ochoa puede reflejar la pérdida de apoyo en el estado. Sin embargo, señaló, mantenerse en el cargo le permitía seguir en la impunidad como lo hizo durante algún tiempo.
“Esto puede ser efecto de una negociación con su partido o incluso con el presidente Peña Nieto”, comentó.
Cuestionado sobre la posición del PRI ante la renuncia, Lazo manifestó que hoy el partido lo que busca es no ser asociado con casos de corrupción y ello es lo que representa Javier Duarte ante la sociedad.
Sin embargo, consideró, todas las partes: Presidente de la República, PRI y Javier Duarte, seguramente no pierden comunicación y a partir de ahí comenzarán a definirse posturas y atender compromisos.
El director de Global Consultores Asociados y analista político, Eduardo de la Torre, coincidió en que Duarte de Ochoa pudo haber negociado con el gobierno federal su salida, sobre todo porque en varias ocasiones el mandatario estatal afirmó que no se separaría del cargo antes del 1 de diciembre próximo.