justiciaysociedad@eluniversal.com.mx

La Arquidiócesis Primada de México reiteró que en la capital del país sí existe una ley que puede prohibir la marcha del Frente Nacional por la Familia convocada para este sábado 24 de septiembre.

Luego de que la titular del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación (Copred) de la Ciudad de México, Jacqueline L’Hoist, tachara de “mentiroso” a Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis de México, éste expuso que en los mismos “documentos intimidatorios” que les hicieron llegar están los motivos por los cuales debería prohibirse dicha marcha.

“La señora Jacqueline [L’Hoist] me llamó mentiroso, yo no lo hago, simplemente expongo aquí que sí existe una ley en la Ciudad de México que, de aplicarse, no permitiría la marcha de los padres de familia, y lo demuestro con los mismos documentos intimidatorios que me enviaron”, dijo.

Comentó que en el documento que envió un grupo de 26 personas de la comunidad LGBTTTI al semanario Desde la fe, se argumenta que los derechos de ese sector “han sido reconocidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación como derechos humanos, la misma Corte en 2013 resolvió que las expresiones de homofobia no forman parte del principio de libertad de expresión”, señaló.

Niegan que haya persecución. El vocero del Arzobispado de México afirmó que el artículo 5 de la Ley para Prevenir y Eliminar la Discriminación del Distrito Federal es “muy claro” al referir que es delito cualquier manifestación que tenga por efecto menoscabar el derecho y libertades fundamentales de igualdad frente al ejercicio de derechos.

“Según el Copred, la oposición a los matrimonios igualitarios pretende negar derechos humanos fundamentales como el matrimonio y, por lo tanto, la igualdad entre las personas heterosexuales y homosexuales. Esto, según la ley, es claramente una conducta delictiva de discriminación y de homofobia, por lo tanto, censurable y prohibida porque es un delito. Y la autoridad no puede proteger conductas o actitudes delictivas”, argumentó.

Valdemar rechazó que la oposición a los matrimonios igualitarios es una conducta discriminatoria y homofóbica, sino que defiende el derecho de los padres de familia y de la sociedad civil a proteger el matrimonio heterosexual y la familia. Aseguró que está desenmascarando procedimientos “irracionales y legaloides”, así como una conducta persecutoria del “imperio gay”.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses