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pedrovillaycana@eluniversal.com.mx
El titular de la Secretaría de la Función Pública (SFP), Virgilio Andrade Martínez, consideró que la ciudadanía tiene un papel medular dentro de la dirección del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) y aseguró que el gobierno federal asume su compromiso para que los estados del país estén listos para su consolidación.
Al asistir a la inauguración del Congreso Internacional de Administración y del 36 Congreso Nacional de Administración, que se realiza en la capital de Durango, Andrade Martínez afirmó que en el SNA la ciudadanía tiene un papel muy importante, pues asumirá responsabilidades de dirección para prevenir actos de corrupción, tanto en el ámbito estatal como el federal.
“El punto de partida de la reforma del Sistema Nacional Anticorrupción radica en que se ha creado un espacio en el que distintas autoridades van a reflexionar permanentemente sobre las mejores prácticas que se van a aplicar para evitar el problema, pero con un dato muy importante: Estos espacios —a nivel federal y en los estados— serán encabezados por ciudadanos. Por lo tanto, la ciudadanía asume la responsabilidad de establecer cuáles son las directrices para poder prevenir actos de corrupción”, dijo.
El secretario indicó que los funcionarios públicos siguen manteniendo el deber y la responsabilidad de ejecutar aquello que los ciudadanos vayan generando en estos nuevos espacios del SNA.
Informó que a nivel federal se tiene un periodo de un año para poder instrumentar de manera consolidada el sistema; asimismo, en los estados tendrán una responsabilidad idéntica.
Por ello, indicó, el gobierno federal asume la tarea de ir llevando los trabajos de coordinación en los estados para que todos al mismo tiempo puedan estar listos para la instrumentación completa del sistema.
Respaldo social. Andrade manifestó que estos dos congresos que se realizan en la capital duranguense tienen un enfoque que caracteriza a las generaciones contemporáneas: la responsabilidad social, la sustentabilidad y la globalización.
“La responsabilidad social implica no solamente la acción de responder con el mandato o la encomienda que tenemos en la vida profesional. Se trata de corresponder a lo que recibimos de la sociedad. Quienes estamos colaborando con ellos en nuestra vida profesional —en este caso, en la administración— tenemos el deber de manejar adecuadamente y en tiempo los recursos para el cumplimiento de los fines específicos, pero a su vez, las empresas deben responderle a la sociedad”, dijo.
Agregó que la sustentabilidad implica el cuidado escrupuloso del entorno, la conciencia de lo que debe ser precisamente administrado para la preservación de lo que nos da vida y, por lo tanto, hablar acerca de la sustentabilidad implica también una actitud de ética, “porque estamos hablando de nuestra vida”.
