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El Instituto Nacional Electoral (INE) buscará que los espacios de su nueva sede den los servicios requeridos y que “sea lo más austero y productivamente posible”, aseguró el consejero Arturo Sánchez.
Por tanto, los proveedores podrán proponer instalaciones o utilidades, pero los consejeros definirán qué se construye y qué no, aseguró al dar por sólo una “propuesta” la sala de usos múltiples factible para funcionar como cancha de basquetbol, como lo planteó el INE a las firmas interesadas en el contrato.
EL UNIVERSAL publicó ayer que el INE planteó a las 19 empresas que mostraron su interés en la licitación del proyecto ejecutivo para la ampliación y remodelación del Conjunto Tlalpan, que su sala de usos múltiples (macrosala) pudiera convertirse en cancha deportiva, según consta en el acta de la Junta de Aclaraciones del 1 de julio, misma que fue encabezada por el subdirector de Administración Inmobiliaria del INE, Luis Fidel Azcoytia.
El consejero Arturo Sánchez aseguró que los proveedores podrían sugerir hasta “un bosque”, pero en el resultado del proyecto se propondrá otra cosa, y una vez aprobado éste “veremos quién construye y cuánto nos va a costar la construcción, plazos y tiempos”.
“De la maqueta a la realidad hay una gran distancia”, indicó.
La macrosala debe servir para diferentes tipos de eventos, por ejemplo, explicó, este año hubo elecciones locales y “estuvimos amontonados en la sala de consejeros viendo el Sistema de Información sobre la Jornada Electoral y viendo el PREP de cada estado” en un espacio reducido.
“La macrosala debe servir de espacio para esos eventos, exposiciones, sala de prensa, conferencias, mil cosas, eso es lo que queremos y para eso es el proyecto ejecutivo, y el que haga la mejor propuesta será el que gane”, dijo.
El consejero explicó que si alguno de los proveedores propone una macrosala que se use sólo cada tres años duda que ese proyecto gane, pero “si hay otro que propone otras utilidades para cursos y otras cosas, y nos hace un diseño ejecutivo con base en el arquitectónico que sea más funcional, pues seguramente un proyecto así de creativo ganará”.
INE perfila recortes. La obra sigue en pie, pese a las restricciones y ajustes presupuestales que el instituto está por aplicar en breve, dado que tuvo que erogar para la elección de diputados de la Asamblea Constituyente 500 millones de pesos presupuestados originalmente para otras tareas y la Secretaría de Hacienda no le ha restituido lo gastado en ese proceso electoral.
Así, el próximo miércoles, la Junta General Ejecutiva del INE decidirá qué programas deberá recortar en presupuesto o reducir el alcance de algunas de las metas para hacer frente al faltante.
“El replanteamiento y/o reducciones presupuestales” de proyectos afectará a las direcciones de Prerrogativas y Partidos, Administración; Servicio Profesional Electoral Nacional, Organización Electoral, Unidad Técnica de Vinculación con los Organismos Públicos Locales y Unidad Técnica de Transparencia y Protección de Datos.
