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La Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) vive un estado crítico en Oaxaca, acepta su secretario general, Rubén Núñez Ginés.

En entrevista con EL UNIVERSAL se queja de que buscan satanizar al movimiento democrático nacional.

Visiblemente más delgado que hace un año, cuando negociaba directamente con la Secretaría de Gobernación, Núñez Ginés declara que el gobierno quiere desaparecer a la Sección 22 como lo ha hecho con otros sindicatos.

El próximo domingo, justo en la conmemoración del Día del Maestro, los planteles adscritos a la CNTE en 28 entidades del país comenzarán un paro nacional indefinido en contra de la reforma educativa.

Desde sus oficinas en el Centro Histórico de Oaxaca, con menos personal y movimiento que en los años de poderío de la CNTE, Núñez Ginés no descarta manifestaciones en las elecciones del 5 de junio.

Recuerda que la CNTE acordó que de ninguna manera se harán pactos con los candidatos a gobernador, diputados o presidentes municipales, e incluso niega que haya un acuerdo con el presidente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador.

“Cuando el sol muera”

¿Ve reducido el peso del magisterio con la reforma aplicada en Oaxaca, han perdido fuerza?

—Lo que vivimos en Oaxaca es crítico, tenemos que ser claros. Pero es a raíz de que los gobiernos estatal y federal nos congelaron las cuentas, los sueldos, detenido a cinco compañeros. Es la imposición, la guerra. Hay más notificaciones judiciales. Es para meter miedo y que no salgamos a las calles, pero ya está acordado el estallamiento del paro nacional.

¿Con el congelamiento de cuentas, las detenciones, el gobierno quiere desaparecer a la CNTE?

—Esa ha sido la intención del gobierno desde hace mucho tiempo, como en el caso del SME, de los ferroviarios, las enfermeras, también contra la CNTE, quieren desaparecer a la coordinadora. Pero es el referente que nos queda y lo vamos a defender hasta las últimas consecuencias. La CNTE morirá cuando el sol muera, vamos a dar la batalla.

¿Qué esperan de este paro nacional del día 15?

—Por el acuerdo y la caracterización, es un paro nacional indefinido y unitario, es decir, cabemos todos los simpatizantes de la CNTE, todos los maestros que si no militaban en la coordinadora y se ven afectados por la reforma educativa, se van a sumar a la lucha.

¿Habrá megamovilizaciones en todos los estados?

—Es una concentración nacional en la Ciudad de México y también de manera sincronizada en cada una de las entidades. Pero estamos analizando si es una megamarcha o un plantón, ya sea en el Zócalo, Gobernación o el Monumento a la Revolución. Eso lo decidiremos el domingo.

¿Qué rol juega la Sección 22 en el actual proceso electoral?

—El Congreso Político extraordinario abordó el tema de la coyuntura electoral y uno de los puntos que avaló el movimiento fue que no coincidimos en que los mismos compañeros estén dando su voto a los partidos que firmaron el Pacto por México, no sólo en Oaxaca, sino todo el país, porque el pacto afectó a todos los estados.

¿Se refiere a los partidos políticos PRI, PAN y PRD?

—Así es, por impulso de las reformas mal llamadas estructurales, particularmente la educativa, pues no tiene nada que ver con la transformación de la educación en México.

Como Sección 22 tenemos un compromiso de no hacer convenio alguno con partidos políticos o candidatos, porque es un movimiento social, donde convergen distintas fuerzas y grupos. Pero hay libre militancia siempre y cuando no se afecte o quede en entredicho el nombre de la Sección 22, del movimiento democrático o de la misma coordinadora.

Hay integrantes de la 22 que son candidatos, ¿se les sancionará?

—Sabemos que hay maestros que están participando como candidatos o promotores del voto, pero bueno ahí somos respetuosos de esa militancia que es personal, lo que sí hemos cuidado es que no se comprometa ni se firme a nombre de la Sección 22 o del movimiento democrático. No podemos comprometer los principios ni la organización de la Sección 22.

¿La Sección 22 firmó acuerdo con Morena de López Obrador?

—Sí, sonó eso en los medios que había un grupo de maestros de la Sección 22 que se reunieron con López Obrador. Tengo que decir que como Comisión Política nos reunimos con Andrés Manuel [López Obrador] hace meses, me parece que en diciembre de 2015, para una coordinación de fuerzas a nivel nacional, porque lo mismo hicimos con el padre Solalinde, con Hugo Aboites, César Navarro, con sindicatos de estudiantes y de trabajadores.

Es una ruta que estuvo avalada por la Asamblea Estatal y la misma Coordinadora Nacional, de tal forma que no sólo como Comisión Política de Oaxaca sino también como secretarios generales nos hemos reunido con organizaciones y personajes.

¿Se pactó apoyo electoral con López Obrador?

—No, de ninguna manera. Con ningún candidato hay pactos, ningún compromiso, ningún convenio, ninguna firma. Nuestra organización es la búsqueda de la defensa de los derechos y proteger a la educación pública en esta etapa.

¿Habrá manifestaciones, quema de urnas por parte de la CNTE en las elecciones del 5 de junio?

—El magisterio tiene claro que hay un voto de castigo y no habrá apoyo a los partidos que firmaron el pacto y si se definen movilizaciones aquí en Oaxaca tendría que ser motivo de un acuerdo estatal. No descartamos movilizaciones porque la coyuntura se va a dar, pero tenemos que salir de manera organizada.

¿Se acabó la interlocución con la Secretaría de Gobernación?

—Prácticamente ese es el motivo del estallamiento del paro del 15 de mayo: la cerrazón al diálogo.

¿Qué ha quedado pendiente del pliego petitorio?

—La mayor parte no ha quedado resuelto, sólo hubo acuerdos políticos.

Quieren echar abajo la reforma educativa, pero el secretario Aurelio Nuño dice que se aplicará, ¿cuál es la apuesta de la Sección 22?

—Es correcta una reforma educativa, pero los planes y programas más allá de los 10 años tienen que ser transformados porque los tiempos cambian. Coincidimos en que debe haber una evaluación, pero en lo que no estamos de acuerdo es que sea una reforma impuesta. Es una vía punitiva, de despido y así no se puede transformar la educación en México.

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