Morena debutó como partido político con una votación superior a 8% en las elecciones del pasado 7 de junio. Esos resultados para el fundador absoluto del partido, Andrés Manuel López Obrador, sirvieron para consolidarse y forjar su camino rumbo a los comicios presidenciales de 2018, los terceros en los que el tabasqueño participará consecutivamente.

Él se ha convertido en uno de los políticos más criticados por su presencia constante en spots de Morena, además de sus giras por todo el país, pero ninguno de sus adversarios que lo ha señalado ha podido comprobar con la ley en la mano una promoción constante del líder partidista.

El tabasqueño es la principal figura de Morena, fue él quien desde abajo forjó al partido Movimiento Regeración Nacional (Morena), con la finalidad —dicha por él mismo— de llegar a la Presidencia y hacer un cambio verdadero en el gobierno.

A pesar de los embates, López Obrador no cuenta con multas ni sanciones por parte de autoridades electorales. Recientemente comenzó a grabar nuevos spots para promocionar a Morena rumbo a los comicios de 2016.

Si bien es cierto que el DF es uno de sus bastiones, el próximo año se medirá en los estados. En ese terreno se verá la fuerza que ha conseguido Morena, que busca arrebatar el lugar de la principal fuerza de izquierda al PRD.

A López Obrador no le importan las alianzas con otros partidos. Al PRD le ha negado una coalición electoral. Él prefiere ir solo con su partido, sin aquellos perredistas que lo han tachado de mesiánico por querer ser candidato presidencial por tercera ocasión.

López Obrador presentó al gobierno federal un proyecto alterno de aeropuerto para la ciudad de México, que según sus estimaciones, le ahorraría 100 mil millones de pesos al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.

Andrés Manuel fue electo presidente nacional de Morena el pasado 20 de noviembre. Pasó dos años como presidente del Consejo Nacional, órgano desde donde tomaba decisiones y era la figura partidista por antonomasia.

El tabasqueño movió sus piezas como en el ajedrez para ser el presidente de Morena y de esta manera encabezar las elecciones de 2016, pero también para ser la imagen de cara a las presidenciales de 2018. Como él mismo lo ha dicho: “La tercera es la vencida”.

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