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Al concluir su participación en la Cumbre del G-20, el presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que la disponibilidad de más y mejores fuentes de energía, así como la adopción de tecnologías de mayor eficiencia son indispensables para acelerar el crecimiento económico de manera sostenida.
Ante los líderes de las principales economías del mundo, asentó que con la reforma energética “México transformó su paradigma”, permitiendo la participación del sector privado en toda la cadena de valor de hidrocarburos, y prácticamente en la totalidad del sector eléctrico.
Para el Presidente de la República hay un amplio interés por invertir en México, incluso en un contexto de menores precios del petróleo, ya que esta reforma estructural “estableció condiciones para aumentar la producción, transformación y distribución de energéticos de manera transparente, eficiente, competitiva y sustentable”.
Durante la Comida de Trabajo de la Cumbre de Líderes del G-20, última actividad de este encuentro, señaló que con el uso de energías más limpias como el gas natural, de 2012 a 2015 la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha reducido sus emisiones en 57%.
Hizo énfasis en que además con la reforma hacendaria se estableció un impuesto a los combustibles fósiles de acuerdo con su contenido de carbono, y no sólo se ha eliminado el subsidio a las gasolinas, sino que el Congreso aprobó un esquema de impuesto fijo para esos combustibles, eliminando la posibilidad de que en el futuro se vuelvan a dar subsidios.
En su mensaje, el presidente Peña Nieto afirmó que en la actual coyuntura de bajo crecimiento de la economía global las naciones del Grupo de los 20 deben renovar esfuerzos para facilitar e incrementar su comercio. “El crecimiento económico sostenido e incluyente que buscamos requiere un comercio internacional más dinámico, lo mismo que energía suficiente, limpia y a menores costos. Así lo hemos hecho en México”, puntualizó el mandatario.
El presidente Enrique Peña Nieto celebró que los esfuerzos del G-20 para fortalecer el crecimiento económico global incluyan un renovado compromiso con el sistema multilateral de comercio y con políticas de mayor eficiencia energética, que contribuyan a frenar el cambio climático.
Suscriben acuerdo. Durante la comida, los representantes de las 20 economías más importantes del mundo suscribieron el Comunicado y el Plan de Acción de Antalya. El Jefe del Ejecutivo mexicano manifestó su reconocimiento al liderazgo de Turquía como Presidente del G-20, y auguró el mayor de los éxitos a China, que asumió esa responsabilidad.
Se congratuló por el compromiso del grupo para que en la COP-21, a celebrarse en París, se acuerden las bases de un nuevo marco global vinculante para enfrentar el cambio climático.
Durante la última jornada de actividades en la Cumbre del G-20, el presidente Peña Nieto sostuvo reuniones bilaterales con los presidentes de China y Turquía, así como con el presidente del Consejo de Ministros de Italia.
Mientras que el chino Xi Jinping manifestó el interés de su país por invertir en las Zonas Económicas Especiales, que eventualmente se instalarán en el sureste mexicano, el turco Recep Tayyip Erdogan manifestó el deseo de su gobierno por continuar la construcción de un TLC con México, y el italiano Matteo Renzi mostró la disposición de su gobierno y empresarios de su nación por acrecentar su inversión en el sector energético mexicano.
Visita de Estado a Filipinas. Tras concluir la Cumbre del G-20, el presidente Peña Nieto arribó a Manila a fin de realizar a partir de hoy una visita de Estado a Filipinas y participar en la 27 Cumbre de Foro de Asociación Económica Asia-Pacífico (APEC).
