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Largo, tedioso y difícil fue como calificaron los maestros la evaluación del desempeño tras permanecer cinco horas para presentar este sábado la primera parte del examen sobre conocimientos y competencias didácticas, que constaba de 154 reactivos.
Minutos antes de las 9:00 horas, los docentes arribaron al Centro de Desarrollo Informático Arturo Rosenblueth, una de las sedes donde se aplicó la prueba para la Evaluación de Desempeño. Durante este primer día los maestros comentaron que había faltas de ortografía, errores de sintaxis, fallas en el sistema que sacaban a los sustentantes de la sesión mientras realizaban el examen.
Ana Lourdes García, maestra de nivel primaria con 25 años de experiencia, comentó que el tiempo fue insuficiente para realizar la prueba y que el ambiente no era el adecuado, ya que la presión que se sentía por concluir la prueba y los ruidos de un mitin que realizaron los integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) afuera de la sede, dificultaron la concentración.
“Fueron muchas preguntas y dentro del examen hubo algunas que estaban mal redactadas, con errores de ortografía, incluso de dedo que ponían unas palabras por otras. Las preguntas nada tiene que ver con lo que realmente trabajamos dentro del grupo, no van de acuerdo al contexto en el que trabajamos, había interrogantes sobre escuelas rurales y yo trabajo en una zona urbana. Ese examen no va arrojar qué tan preparados estamos”, expresó.
Las fallas en el sistema estuvieron presentes desde que debía subir a la plataforma su expediente de evidencias de enseñanza.
Detalló que no recibió ningún tipo de capacitación para realizar el examen, dado que las asesorías que brindaban en la escuela donde labora no coincidían con sus horarios, ya que trabaja tanto en el turno matutino como vespertino y destacó que los cursos de preparación externos costaban entre 2 mil y 3 mil pesos.
Silvia Gómez, también maestra de nivel primaria con 15 años de experiencia, externó que el examen fue largo y asistió a la evaluación, pero no está de acuerdo con ella, argumentó que hay otras maneras de calificar el desempeño como son las incidencias, los retrasos, el trabajo con los alumnos y la demanda que cada escuela tiene.
Expuso: “No sé cómo haya sido la selección para acudir al examen, a mí me informaron en mi escuela, nos tocó a tres de los 18 docentes de la plantilla”, comentó.
En tanto que una maestra del nivel primaria con siete años de experiencia, cuyo nombre prefirió mantener en el anonimato, informó que no está de acuerdo con la evaluación, pero que lo presenta para demostrar que está dispuesta a ser evaluada y por temor a perder su empleo.
“Creo que va en contra de nuestros derechos laborales, sin embargo, estoy aquí presentándolo. No es que no queramos ser evaluados, sino que como se esta llevando no es correcto. Lo presento, tal vez por miedo porque se maneja que si no lo hago automáticamente estoy fuera”, aseveró.
Al acercase las 14:00 horas, tiempo en el que debían terminar la evaluación, los docentes comenzaron a salir poco a poco de la sede de aplicación; la tensión y el estrés se percibían en sus rostros, algunos evitaban hablar sobre cómo les había ido durante la evaluación, únicamente lanzaban frases como: “Todavía traigo las preguntas en la mente”, “Siento que me va a estallar la cabeza”.
Los docentes deberán presentarse este domingo a realizar la segunda parte del examen, la cual será sobre la planeación didáctica argumentada.
