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Una terna integrada por magistradas y otra por abogados, que calificó como de Estado, envió ayer el presidente Enrique Peña Nieto al Senado de la República, para la elección de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que ocuparán las vacantes que se abrirán desde el próximo 30 de noviembre, al concluir los periodos de Olga Sánchez Cordero y Juan Silva Meza.
El ofrecimiento del Senado fue revisar con responsabilidad y objetividad, además de buscar equilibrios ideológicos, políticos y de género.
El Senado tiene un plazo constitucional de 30 días para elegir ministros, que correrá a partir de que el pleno sea notificado por el presidente de la Mesa Directiva, Roberto Gil Zuarth (PAN), el próximo 18 de noviembre, y turne los seis expedientes a la Comisión de Justicia, que dictaminará la idoneidad de las candidaturas con base en una mecánica interna de dictaminación.
“Que podamos elegir a la ministra y al ministro que le sirvan a nuestros propósitos de justicia, pero sobre todo que permita mantener los equilibrios ideológicos, políticos y de género en el máximo órgano de justicia en nuestro país”, puntualizó Gil Zuarth, presidente del Senado.
Las propuestas fueron entregadas la tarde de ayer por el consejero jurídico del Ejecutivo federal, Humberto Castillejos, quien dijo que las ternas “reflejan los dos perfiles que el Presidente de la República consideró que requiere la Suprema Corte y los mejores candidatos para cumplir con ellos”.
Al recibir las ternas, Gil afirmó que la elección de los dos ministros se llevará a cabo “en los tiempos que le quedan al actual periodo ordinario”, cuya sesión de clausura será el 15 de diciembre. Dijo que el análisis de las propuestas se hará “con responsabilidad, total objetividad y cuidado”.
Las propuestas. Una terna femenina está integrada por las magistradas Sara Patricia Orea, Norma Lucía Piña y Verónica Judith Sánchez.
Al respecto, Castillejos dijo: “Se propone a mujeres con una importante trayectoria en la actividad jurisdiccional, destacadas por la comprensión del nuevo modelo constitucional de los derechos humanos”.
La terna masculina, conformada por el magistrado Álvaro Castro, el procurador Alejandro Jaime Gómez y el magistrado Javier Laynez Potisek, destacó Castillejos, presenta abogados de Estado que han trabajado en distintas administraciones, y su conocimiento es un insumo invaluable en la construcción constitucional de México.
A las 14:10 horas de ayer, y precedido de semanas de debate social y foros, incluso en el Senado, en los que se llamó al Ejecutivo a presentar dos ternas de mujeres, Gil Zuarth recibió de manos de Castillejos los expedientes con los perfiles de los candidatos propuestos por Peña Nieto.
Castillejos dio lectura a una ficha curricular de los seis candidatos, agrupados en sus ternas y en orden alfabético, y expresó que “en el gobierno de la República confiamos en que [los senadores] tomarán su decisión a la luz de las necesidades de nuestro máximo tribunal, con la mayor seriedad y objetividad, por el bien de México”.
Gil, en tanto, subrayó el compromiso de “que muy pronto tendremos los consensos políticos que le den a la Suprema Corte de Justicia mayor fortaleza, que cuiden su institucionalidad y, sobre todo, permitan que la justicia en nuestro país se fortalezca”.
Gil aseveró que el compromiso del Senado es que “en tiempo y forma, de manera responsable, objetiva y, sobre todo, mirando por el bien de la justicia en nuestro país, tengamos debidamente integrada la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.
Es compromiso de la Cámara Alta, remarcó Gil Zuarth, “que podamos elegir a la ministra y ministro que le sirvan a nuestros propósitos de justicia, pero sobre todo que permita mantener los equilibrios ideológicos, políticos y de género” en el máximo tribunal.
El paso a paso de la elección
- El presidente Enrique Peña Nieto puso a consideración del Senado dos ternas para ministros.
- Conforme a lo establecido en el artículo 96 de la Constitución, una vez que el Senado reciba las ternas contará con 30 días (improrrogables) para la designación, que se hará por el voto de las dos terceras partes de los senadores presentes. Debe haber al menos 86 legisladores.
- Si el Senado no resuelve en dicho plazo, el Presidente nombrará a la persona que pertenezca a esas ternas para ocupar el cargo.
- En caso que el Senado rechace las primeras ternas, el jefe del Ejecutivo deberá presentar una nueva.
- Si la otra opción es rechazada, el ministro será designado por el Presidente, siempre y cuando haya formado parte de la segunda terna.
