El Senado de la República condenó el atentado que sufrió ayer el ex gobernador de Colima, Fernando Moreno Peña, quien fue atacado a balazos y se encuentra delicado de salud, pero fuera de peligro.
Roberto Gil Zuarth, presidente de la Cámara de Senadores, dijo que el hecho puede ser aislado, pero también existe posibilidad de que sea el inicio de una escalada y alerta para que Colima no entre en un proceso de descomposición de seguridad pública.
“Es una situación lamentable que debe motivar una respuesta inmediata del Estado mexicano, de las instituciones de seguridad pública, debe hacerse las investigaciones para conocer quiénes están detrás de las agresiones”, indicó.
Al respecto, el coordinador de la bancada del PRD en el Senado, Miguel Barbosa Huerta, condenó el atentado y llamó a las autoridades a ejercer mayor efectividad en el combate al crimen organizado.
“Para mí es un hecho en el cual un ex gobernador sufre de un atentado y peligra su vida después de esto”, expresó.
Asimismo, exhortó a las autoridades federales a que atraigan el caso, pues sostuvo que las autoridades locales no cuentan con la capacidad para poder resolverlo.
El senador panista, Jorge Luis Preciado Rodríguez, expresó que el atentado contra el ex gobernador lo perpetuó alguien que quiere “cobrar viejas cuentas”.
“Un delincuente común no atenta contra un ex gobernador, yo creo que alguien quiere cobrar viejas cuentas, yo creo que por ahí deben de investigar. Y, bueno, ahora que se recupere creo que su propia declaración pues va a dar mucha luz de dónde pudo venir este lamentable atentado”, resaltó el senador panista.
A su vez, el coordinador de los senadores del PAN, Fernando Herrera Ávila, dijo que si la autoridad local no da garantías pues el asunto debe tener una colaboración de una instancia superior.
tpc