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Las bancadas en el Senado serán sometidas a disposiciones de disciplina en el gasto, lo que se reflejará en economías significativas, de acuerdo con un borrador del programa de austeridad que se conocerá la semana próxima.
Con las normas que serán puestas en vigor de inmediato, también la Cámara Alta ahorrará 35 millones de pesos, en lo que resta de 2015, y el paquete de disposiciones sentará bases para disminuir gastos sistemáticamente.
Se prevén ahorros en los renglones de servicios y gasto corriente, y se anticipa que los senadores gastarán menos en automóviles, viajes internacionales, y se reordenará la operación del órgano legislativo para que suprima gastos de papel.
Al respecto, el presidente del Senado, Roberto Gil Zuarth (PAN), dijo que la Cámara Alta opera con dispendio, por lo cual hay falta de orden, y en ese sentido se buscará reducir la discrecionalidad actual con el establecimiento de normas, reglas y procedimientos que estarán vigentes para senadores, funcionarios y empleados.
“El plan de austeridad es ambicioso y va en serio”, dijo Roberto Gil Zuarth, quien ha asegurado que se pueden lograr ahorros significativos sin que el Senado se quede en medidas de valor cosmético.
El plan de austeridad del Senado responde al panorama general de restricciones en el gasto público, que estuvo acompañado por grupos parlamentarios con anuncios parciales, en la Cámara de Diputados, por ejemplo de renuncias al seguro de gastos médicos mayores, y propuestas de senadores por recortarse la mitad de la dieta.
La Mesa Directiva del Senado empezará por reducir los servicios personales, así como en el gasto corriente, y al respecto, Gil Zuarth indicó ayer, a manera de ejemplo, que en las actividades del Senado el consumo de papel “es una barbaridad”. Ahí estará un área de oportunidad para las economías significativas. Sólo se manejará en papel, lo que debe constar por ese medio, dijo.
La Cámara Alta contará con un modelo administrativo que garantice la máxima transparencia, y en ese sentido, los grupos parlamentarios que reciben recursos distribuidos en 18 conceptos, obtendrán las percepciones en un solo canal, “para homologar la contabilidad de las bancadas en la forma en que documentan y comprueban sus gastos”.
Los viajes internacionales serán otra área de ahorro, con disposiciones de disciplina que ordenará que sólo se puedan comprar boletos de avión con anticipación mínima de 15 días; se tendrán que programar estas adquisiciones y se recurrirá a la modalidad de subasta, ya no a la compra individual que lleva a cabo cada senador, incluso de un día para otro, lo que encarece el servicio adquirido con cargo a los mexicanos, señaló el panista.
El Senado en este caso deberá contar con proveedores preseleccionados, como se hace en el Gobierno federal, que elige la mejor condición de precio, y de esta manera esta decisión será centralizada. “Si ponemos orden y disciplina, los ahorros serán mayores en lo sucesivo”, aseguró.
Cuando se invite al Senado, éste correrá con los gastos del viaje internacional, pero cuando se trate de invitaciones personales a legisladores para que participen en actividades fuera del país, serán sus grupos parlamentarios los que cubran los costos, agregó Gil al adelantar parte de las reglas que anunciará la próxima semana.