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Los perredistas dieron vueltas y vueltas ante el fuego amigo avivado ayer por jóvenes del partido, en el primer “roast” de aspirantes a dirigir el PRD nacional, pero Agustín Basave, Zoé Robledo y Beatriz Mojica apenas se doraron.

En aras de innovar, jóvenes del PRD organizaron a su estilo un “roast”, que consiste en un modelo de televisión en donde una figura es sujeta a críticas y comentarios hirientes.

Políticos al fin y al cabo, los aspirantes sobrevivieron al “rostizamiento” con respuestas duras, para evadir preguntas directas, o largas exposiciones para aburrir a la concurrencia.

Organizado por la agrupación juvenil perredista Punto de Encuentro, el formato fue novedoso: límite de tiempo a políticos acostumbrados a alargarse, y preguntas “del Doctor Freud”, para sacar su subconsciente.

Así salieron del “roast” al que fueron sometidos por jóvenes militantes de corrientes perredistas como Vanguardia Progresista o Nueva Izquierda, Basave reconoció que la propuesta de afiliarse y dirigir el PRD “al principio me sacó de balance”.

Parecía una propuesta de locos, “pero en los tiempos anormales que está viviendo el PRD, me pareció normal”, dijo.

Sentado sobre un puf, sin saco y sin mayor formalismo, Basave fue el primero de la noche y el objetivo de su inquisidor Saúl Vázquez, joven internacionalista, fue evidenciar su novatez en el PRD y su paso por el PRI, preguntas de las que se escabulló.

—¿Me podrías explicar cómo se establece un comité seccional, y en base a qué se puede establecer?

—No mira, si de lo que se trata es de hacer una pregunta capciosa, un examen, yo no voy a prestarme a ese juego. A mí me parece que hay cosas muchísimo más importantes en el PRD que memorizarte el estatuto, me parece que un presidente del partido tiene cosas más importantes que hacer que saberse los detalles que puede leer en cualquier momento en el estatuto.

Sin tintes. Ya no volvieron las preguntas incómodas.

Pero el tono relajado de Basave apenas pudo mantenerse con el senador Zoe Robledo y fue imposible con Beatriz Mojica, ex candidata del PRD en Guerrero.

En el diván, frente a preguntas del “Doctor Freud”, Robledo se lanzó contra el PVEM, partido “piojoso y manager del Piojo Herrera” y que gobierna su natal Chiapas.

Cuestionado por su similitud con Manuel Velasco, el mandatario chiapaneco, joven, con un gobernador entre sus antepasados y ex legislador, Zoe Robledo saltó: “no me van a ver güero nunca”.

“Todavía no me pinto el pelo así que no me van a ver el güero nunca, quizá un poco más canoso… siempre he estado cercano al pensamiento mucho más que a la farándula. Yo vengo de una familia que hizo política en el PRI pero no creo que esa sea condición genética que se deba de heredarlo (pero) nunca he militado en ningún otro partido que en el PRD… estuve en Fuerza Ciudadana”, respondió el actual senador por el estado de Chiapas.

La ex candidata a la gubernatura de Guerrero, Beatriz Mojica Morga, cuestionada sobre la legalización de las drogas, dijo que cada quien tiene relación “con la planta de su preferencia”.

—¿Fracaso?

—Esa palabra no existe para las mujeres, atajó para evadir el fuego.

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