El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) , José Ramón Cossío Díaz, señaló que a la corrupción no se le puede atacar con sólo buenas intenciones, actitud moral y de valores, ya que eso es el presupuesto de la acción.
Luego de afirmar que es uno de los temas centrales en el país, agregó que se requiere tener claridad de los instrumentos técnicos de las leyes para establecer las normas y poder desarrollar las políticas públicas que se necesitan para combatirla.
Al participar en la mesa “Retos en materia de anticorrupción y ética del servicio público” , dentro del Foro Gobierno Profesional y Ciudadanía Responsable “El diseño de una Agenda Nacional” , en el Palacio Legislativo de San Lázaro, agregó que una vez que se ha decidido incidir sobre esos instrumentos, es necesario tener los elementos prácticos.
El ministro de la Corte explicó que el combate a la corrupción se debe basar en la eliminación de la impunidad, que ocurre precisamente por las deficiencias técnicas de las legislaciones federales y locales.
Uno de esos problemas es, por ejemplo, que hay una imagen. Desde el principio empieza el problema de diseño, en el que se supone que los únicos corruptos en el país son los servidores públicos.
No se piensa en los corruptores, y en ese sentido no es tan clara esa condición en la ley que se aprobó en la reforma constitucional del 27 de junio de este año; hay énfasis en la responsabilidad administrativa, cuando los particulares no son sujetos de responsabilidad administrativa.
“Al momento que se percibió y se construyó la idea general me parece que se fue con la inercia muy simple de decir que los corruptos son los servidores públicos” , indicó el ministro.
Cossío Díaz señaló que otra situación es que, si no se tiene claro cómo se transfieren los recursos de la corrupción, cómo podrían ser “lavado de dinero” u operaciones para corromper, y no se entiende cómo está la situación financiera ni cómo se transfieren los fondos, “no se puede hacer una política pública” .
“Si no se tiene clara la política pública menos se pueden poner las condiciones claras, jurídicas, técnicas y precisas para enfrentarla.
“Si no se puede hacer eso, entonces diremos que es una ley, una reforma que siguió favoreciendo la impunidad, y claro que la va a favorecer, porque no se tienen las competencias técnicas para entrar a resolver el problema central que tenemos enfrente” , expresó.
Finalmente, advirtió que sin características técnicas no se puede actuar e incidir en este mundo, ni siquiera diseñar las políticas públicas y mucho menos llevarlas a un buen fin.
Explicó que no se tienen las competencias técnicas porque no se entendió que estamos participando de mundos artificiales construidos, respecto a los cuales hay que tomar seriamente el conocimiento de las características técnicas.