Más Información
Sheinbaum tiene su primer convivio navideño con reporteros en Palacio Nacional; ofrece bocadillos y ponche
Sheinbaum critica a oposición por estar a favor de dichos de Trump; “parecen conservadores del siglo XIX”
politica@eluniversal.com.mx
Armando Ríos Piter señala a las corrientes perredistas —entre éstas Nueva Izquierda y Alternativa Democrática Nacional— como las culpables de crear grupos eternos en las dirigencias, de la corrupción, el clientelismo y la situación crítica dentro del partido del sol azteca.
Considera que Nueva Izquierda, corriente en la que militó, tiene que irse de la dirigencia, pues representa lo que no le gusta a la ciudadanía: decisiones tomadas desde la cúpula.
El Jaguar, cercano a Miguel Barbosa, presidente del Senado, propone como medida de supervivencia del PRD desaparecer a las tribus perredistas.
En entrevista telefónica con EL UNIVERSAL asegura ser uno de los aspirantes para relevar a Carlos Navarrete en el cargo de presidente nacional del PRD y, de llegar a la dirigencia, no impulsará alianzas con Andrés Manuel López Obrador ni con el Partido Acción Nacional (PAN).
¿Qué le pasó al PRD en estos últimos años?
—Uno de los principales problemas del PRD en sus últimos años es que se ha clientelarizado y en esa lógica no solamente ha caído en condiciones de corrupción desafortunadas, sino que ha perdido capacidad de contacto con millones de mexicanos. La crisis del PRD tiene que ver con la forma en la que el partido se ha venido convirtiendo en un instrumento donde las decisiones se toman por parte de unos cuantos, donde las famosas corrientes o tribus lo que han hecho es ocupar todos los espacios de decisión y también de representación y esto ha limitado enormemente la capacidad del PRD. Si no logramos remontar esa realidad y se cambia la forma en que se toman las decisiones, pues difícilmente el PRD va a poder salir de la situación crítica en la que se encuentra.
¿Es comparada la operación de corrientes con otros partidos como en el PRI?
—Creo que cada partido tiene su lógica interna, en el caso del PRD lo que hay es grupos que han venido eternizándose en la toma de decisiones con equilibrios internos y acuerdos entre grupos, llámese Nueva Izquierda, Alternativa Democrática Nacional, pues no corresponden a intereses de la gente.
¿Es viable eliminar a corrientes, o cuál sería la propuesta concreta?
—El PRD debe salirse de la línea de confort, no solamente porque es equivocado como partido político, sino que actualmente es una cuestión de supervivencia. Las corrientes tienen que desaparecer como un punto de partida, no como un punto de llegada.
¿Hay un riesgo, entonces, para que Nueva Izquierda imponga a un relevo de Carlos Navarrete?
—Por supuesto. El principal riesgo que se tiene es el del gatopardismo, el de querer cambiar las cosas o hacer que cambian, para que todo siga igual, para que se ponga a nuevos rostros pero que obedezcan a la misma lógica o a una mesa de al lado donde sean los mismos los que sigan tomando las decisiones y eso no va a ayudar al PRD.
El presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Moreno, dice que es una incongruencia desaparecer a las corrientes, ¿qué dice al respecto?
—Creo que muchos que hemos sido votados, como en mi caso, cuando fui diputado federal, después que fui senador, la hemos hecho independientemente de las corrientes políticas. Si alguien piensa que las corrientes son el origen del liderazgo político, es querer mantener esa visión en México.
¿Pertenece a alguna corriente?
—No. He dejado de creer que las corrientes sean un instrumento y creo que el pasado 7 de junio se evidenció que ese modelo ha llegado a su fin. Es una cuestión de supervivencia el desaparecer a las corrientes.
¿El relevo de la dirigencia significa el fracaso de Carlos Navarrete?
—Le tocó un momento sumamente complicado a Carlos Navarrete. Cuando está tomando el PRD, estalla la crisis por Ayotzinapa y fueron meses muy complejos y Carlos toma una decisión que pudiera ser muy visionaria.
¿Haber rechazado la candidatura del gobierno de Guerrero es negativo para que usted pueda llegar a la dirigencia del PRD?
—En política uno tiene que tener convicción, principios y la ética tiene que ser lo que rija las decisiones que uno toma. Cuando decidí no participar como candidato del PRD a la gubernatura de Guerrero dije que no estaba de acuerdo con la corrupción e impunidad que prevalecía en torno al proceso electoral, lo hice criticando a mi partido y muchas cosas que hacían mal.
¿Qué propuesta tiene para reactivar al PRD?
—Hay que meter a los jóvenes en la toma de decisiones, además de tener contundencia para cambiar lo que está mal, cercanía con la gente. Si el PRD no cambia esa forma de tomar decisiones pues las corrientes van a seguir eternizando sus pequeños intereses.
¿Planteará alianzas con Morena y el PAN?
—Esas alianzas no son pertinentes. El PRD tiene que ver su futuro inmediato por cuenta propia en los próximos meses, no debe de caer en la tentación de construir alianzas con el PAN porque eso terminaría desdibujándolo inmediatamente. Pensar en alianzas con Morena, un partido político que a corto plazo ha rechazado las mismas, y en una idea solamente electorera que hay una figura de Andrés Manuel López Obrador, me parece que esa postura está en el pasado.