El periodismo enfrenta nuevos retos ante el impacto del mundo digital, pero también se encuentra en un momento de oportunidad para continuar contando historias que atañen a la sociedad y seguir en la búsqueda de información que se pretende ocultar, coincidieron el filósofo Fernando Savater y el escritor Juan Villoro durante la primera mesa del Encuentro Internacional de Periodismo, que se lleva a cabo en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco, en el marco de los festejos por el centenario de EL UNIVERSAL.
Durante la mesa “¿Los periódicos han muerto? ¡Viva el periodismo!”, moderada por Federico Reyes Heroles, que se realizó en el Salón Juárez, Savater aseguró que el periodismo tiene un compromiso con la verdad, pero no cree en la verdad absoluta, sino en que hay cosas más ciertas que otras. “El periodismo es descubrir la verdad relevante de cada caso”, dijo.
Añadió que en la prensa también se puede decir la mentira más digna, “pero el periodista busca la verdad digna aunque no convenga” y sostuvo que no hay periodistas reaccionarios, salvo los que conocen la verdad pero dicen otra cosa. Los demás, dijo, son progresistas.
“El periodismo ha evolucionado con la tecnología y en esta época se encuentra con el impacto de internet, antes todos buscaban el periódico, luego la radio y la televisión y hoy todos están en internet. El problema no es llegar a la información sino aprender a nadar entre el mar de información que hay, porque no toda es cierta ni relevante. El problema de internet es que no hay informaciones contrastadas y no pasan por el filtro del periodista”, aseguró Savater.
Y añadió: “El periodista es el espía del mundo al servicio de la democracia, la noticia es algo que alguien quiere acallar. El periodismo es una ética y estética de la transición de la noticia y el periodista no sólo acarrea información sino que tiene un olfato para saber qué vale y qué no, nos sirve de orientación. El periodista tiene que tener el respaldo de la sociedad democrática, la sociedad debe ver al periodismo como un bien precioso. Además los periódicos hablan de cosas que uno a veces no busca, el periodismo da perspectivas diferentes”.
Por su parte, Villoro indicó que la mesa tiene que ver con la discusión del fin de un ciclo. “Es el fin de una era y todavía no sabemos a dónde vamos, pero es claro que necesitamos historias para soportar el peso del mundo; al mundo le damos coherencia a través del relato de los hechos. No podemos renunciar a contarnos a nosotros mismos”.
Agregó que el periodismo tienen un deseo de clausura, si algo acaba queremos evaluar lo que ha ocurrido y saber qué es lo que viene. “Pero el presente ha cambiado, el acontecer ocurre al parejo de los hechos y ha cambiado la relación que tenemos con el tiempo y con el espacio. Nos ha llegado una velocidad extrema y nuestra capacidad de reacción es diferente. La realidad parece alejarse un poco, porque está en todos lados”.
Indicó que la información nos llega en cada momento. “Es un fenómeno que da velocidad de datos y nos aleja del mundo tangible y cognitivo. Hay tantas cosas que pasan. El periodismo impreso ya es siempre el periódico de ayer. La marea de información es totalmente útil, pero como dice Savater, necesitamos los filtros. Somos los bárbaros de una nueva era, estamos a la orilla de un océano que todavía no hemos navegado”, dijo.
El escritor y periodista aseguró que el peso del presente reclama otro tipo de periodismo.
“Debemos poner a la vida en el centro de las noticias, qué pasa con la vida que corre. Necesitamos un periodismo de necesidad. Hay otro periodismo de tentación, ese que sólo vemos por tentación tiene un extraordinario futuro. Indagar cosas que antes no eran noticia, pero podemos ponernos de parte de la mayoría. Vamos a encontrar problemas, como los detectives. El periodismo es una forma del arte, literatura bajo presión”, refirió.
rqm