FRESNO, Texas.— Las lágrimas de alegría que derramaron una mujer de Texas y su hija luego de que el sábado regresaron a Houston desde México, marcan el fin de un caso transfronterizo de custodia que duró ocho años e incluyó el envío por error a Estados Unidos de otra menor en contra de su voluntad.
Dorotea García, residente de Houston, y su hija Alondra Díaz, de 13 años, llegaron al Aeropuerto Intercontinental Bush después de que una juez del estado mexicano de Michoacán entregara el viernes la niña a García ya que los exámenes de ADN confirmaron que eran madre e hija.
Horas después, la mujer declaró a la prensa que el regreso de su hija era un bello momento.
“Era lo que anhelaba desde hace muchos años. Por fin puedo tocarla. Está conmigo y doy gracias a Dios”, declaró Dorotea afuera de su casa en un suburbio de Houston mientras abrazaba a Alondra.
Díaz, ciudadana estadounidense por nacimiento, fue llevada a México en 2007 por su padre, Reynaldo Díaz, sin el consentimiento de su madre después del divorcio de la pareja. El paradero de Alondra Díaz no se conocía sino hasta hace poco.
El caso llamó la atención internacional el mes pasado después que una juez en México determinó por error que otra menor, Alondra Luna, de 14 años de edad, era la niña desaparecida y ordenó que fuera entregada a García, que la trajo a Houston.
Pruebas de ADN extemporáneasmostraron que Alondra Luna no era hija de Dorotea, y fue regresada con su familia verdadera a Guanajuato.
Festejo. En el regreso a casa de su madre, la menor fue recibida con globos y letreros en la puerta de la cochera que decían en español “Bienvenida Alondra” y “Te queremos mucho, Alondra”.
La adolescente, quien solía preguntar a su padre dónde se encontraba la madre de ella, declaró que está agradecida de que su progenitora no dejara de buscarla. Afirmó que era maravilloso que una madre hiciera tanto.
Agregó que espera aprender inglés, así como cosas sobre Estados Unidos, donde ahora vivirá, así como de su familia.
Durante una conferencia de prensa, madre e hija se abrazaron y a Dorotea García se le vio conmovida en diversas ocasiones, al relatar su historia.
A la pregunta sobre lo sucedido cuando en abril pasado se identificó erróneamente a Alondra Luna como su hija, la mujer —quien ya había pedido perdón— dijo que le deseaba que le fuera bien a la menor, pero ahora quería enfocarse en el regreso de su hija.
Dorotea García, quien tuvo un conmovedor reencuentro esta semana con su hija en la sala de un juzgado en Los Reyes, Michoacán, dijo que no impedirá que su ex esposo hable con la menor.
La otra Alondra. En imágenes de video difundidas ampliamente, Luna grita mientras se resistía desesperadamente a policías que se la llevan por la fuerza en México.
La juez mexicana que estuvo a cargo del caso de restitución internacional rechazó en abril las peticiones de Alondra Luna y la familia de ésta para que se efectuaran exámenes de ADN bajo el argumento de que esa situación no competía a su autoridad. Ahora han intentado infructuosamente que la juez les ofrezca una disculpa.
Debido a la exposición mediática del caso, Reynaldo Díaz entregó a la verdadera Alondra Díaz a miembros de la familia, que después la presentaron a las autoridades y afirmaron que la menor estaba dispuesta a irse con su madre. La juez espero la confirmación de los exámenes de ADN, para no cometer la misma pifia. AP
