Las relaciones entre China y Estados Unidos se ven afectadas por algunos “factores negativos”, dijo el presidente chino, Xi Jinping, durante la conversación telefónica que mantuvo con su homólogo estadounidense, Donald Trump, luego de que aumentara la tensión porque un buque militar de Washington se acercó el domingo a una isla ocupada por Beijing. Además, los mandatarios hablaron sobre Taiwán, Corea del Norte y la cumbre de líderes del G20.
Xi y Trump intercambiaron puntos de vista sobre la cumbre de líderes del G20 que tendrá lugar los próximos viernes y sábado en Hamburgo (Alemania) y ambos acordaron mantener una reunión bilateral al margen de esa cita.
“El presidente chino señaló expresamente que las relaciones China-EU han registrado un gran progreso recientemente, pero también han sido afectadas por factores negativos”, señaló el portavoz de Asuntos Exteriores, Geng Shuang.
Xi expresó a Trump su confianza en que Washington mantenga su respeto al principio de una sola China, después de que el Departamento de Estado de EU autorizara la venta de armas a Taiwán por valor de mil 400 millones de dólares.
Trump conversó telefónicamente el domingo por separado con el mandatario chino y con el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, sobre la amenaza nuclear de Corea del Norte. Xi y el magnate “reafirmaron su compromiso con una península coreana desnuclearizada”.
La conversación telefónica entre Xi y Trump tuvo lugar después del último percance en el que un buque de guerra estadounidense pasó por las inmediaciones de una isla controlada por Beijing, en el mar de China Meridional, hecho que el ministerio chino de Relaciones Exteriores calificó de “seria provocación política y militar”.
El gesto de Estados Unidos, justo antes de la conversación entre los dos mandatarios, que estaba prevista, parece confirmar el endurecimiento de las relaciones bilaterales, deshaciendo así el acercamiento que existía desde abril y la cumbre de Mar-a-Lago en Florida entre los dos hombres. Además, en los últimos días, Trump se ha dicho “decepcionado” porque China no logró los avances con Corea del Norte que él esperaba.
En tanto, Xi llegó ayer a Moscú en una visita oficial de dos días, con el propósito de estrechar los lazos económicos y la cooperación estratégica con Rusia.
El presidente ruso, Vladimir Putin, calificó la visita de Xi de un “importante acontecimiento en las relaciones bilaterales”.
Yuri Ushakov, asesor de Putin en política exterior, destacó que en sus contactos con Xi, el presidente ruso mantiene un “diálogo estrecho, interesante, puede decirse, de confianza” y ambos mandatarios coinciden en profundizar su cooperación económico-comercial.
