La cónsul de México en San Antonio, Texas , Reyna Torres Mendivil, confirmó hoy que varios mexicanos figuran entre los nueve muertos y 31 sobrevivientes de un grupo de indocumentados que fue encerrado en la caja de un tráiler en una fallida operación de contrabando.
Al participar esta noche en una vigilia en honor de las victimas, organizada en el atrio de la Catedral de San Antonio , la cónsul dijo que no estaba en condición de precisar el número de connacionales involucrados en el incidente ni de informar sus identidades, hasta que se notifique a sus familiares.
Añadió que personal del Consulado visitió este domingo los distintos hospitales donde son atendidos los inmigrantes que sobrevivieron para entrevistarlos, determinar su nacionalidad y brindar la atención y asistencia legal necesaria a los connacionales involucrados.
En la vigilia, organizada por el grupo Raíces, que da asistencia legal a familias de inmigrantes, Torres Mendivil leyó un comunicado de la cancillería mexicana en el que el gobierno de México expresa sus condolencias por el incidente y pide a las autoridades una investigación para deslindar responsabilidades.
La Oficina del Procurador Federal para el Oeste de Texas informó en un comunicado que todas las victimas fatales son hombres adultos.
“En este momento, los investigadores están haciendo esfuerzos para identificar a las víctimas y tratará de notificar a familiares. Los funcionarios no divulgarán las identidades de las víctimas hasta que los familiares puedan ser notificados”, expuso la dependencia.
El incidente es el más grave registrado en Texas relacionado con el tráfico de indocumentados desde mayo de 2003, cuando 19 inmigrantes fallecieron asfixiados por el calor en la caja de un tráiler abandonado cerca de la comunidad de Victoria, Texas.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, señalo en un comunicado este domingo que “la perdida de vidas es una angustiosa tragedia” e indicó que el tráfico de seres humanos “es una epidemia en la que Texas está trabajando para erradicar”.
“Hasta entones, Texas continuará proveyendo protección a las victimas que han sido robados de sus derechos más básicos y aplicará todo el peso de la ley a los perpetuadores de este despreciable crimen”, indicó Abbott.
Agentes del Departamento de Policía de San Antonio que respondieron a una llamada de un empleado de Walmart, después de la medianoche del sábado, encontraron a ocho inmigrantes dentro del remolque cerrado, y a otros 31 en condiciones que iban desde algunos ilesos, hasta otros en situación grave.
El jefe de la policía de San Antonio, Williams McManus, dijo que luego de revisar videos captados por las cámaras de la tienda, se observó que varios vehículos llegaron y recogieron a mucha gente que iba en ese remolque y que sobrevivió al viaje.
Thomas Homan, director interino de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) de Estados Unidos, informó que más de 100 personas podrían haber viajado en el tráiler.
El conductor del tráiler identificado como James Mathew Bradley, de 60 años, y originario de Clearwater, Florida, fue detenido y se encuentra en una cárcel federal de San Antonio bajo cargos de contrabando de extranjeros.
Bradley, quien deberá comparecer ante un juez este lunes para ser instruido de cargos, es el propietario y operador del tráiler que laboraba bajo la razón social de Pyle Transportation, una compañía con sede en Schaller, Iowa.
El camión estaba parado al menos desde la noche del sábado en una esquina del estacionamiento de una tienda Walmart en el suroeste de la ciudad, adyacente a la carretera interestatal 35, que conecta a San Antonio con la comunidad fronteriza de Laredo, Texas.
El Departamento de Policía de San Antonio informó que se cree que los ocho inmigrantes que fallecieron en el lugar, murieron como resultado de la exposición al calor y la asfixia, por las temperaturas extremas en el interior de la caja del tráiler. Una novena persona falleció horas más tarde en un hospital
De acuerdo con las autoridades, la caja del camión era refrigerada pero el aire acondicionado no funcionaba.
El meteorólogo Jason Runyen, del Servicio Nacional del Clima, dijo que las temperaturas este sábado en San Antonio alcanzaron los 37 grados centígrados en el exterior y dentro de la caja del camión, pudieron haber superado los 46 grados centígrados.