Millones de venezolanos salieron ayer a votar, dentro y fuera del país, contra la Asamblea Constituyente convocada por el presidente Nicolás Maduro.
Fue una jornada que superó las expectativas de la alianza opositora que organizó la votación, la cual se vio manchada por la muerte de una mujer en Caracas que fue alcanzada por una bala disparada por hombres en motocicleta contra un grupo de participantes en la consulta.
Los partidarios al gobierno, por su parte, salieron también a votar, pero en el “simulacro de voto”, un “ejercicio” convocado por las autoridades previo a la elección de la Asamblea Constituyente del próximo 30 de julio.
Los puntos de participación para el referéndum opositor abrieron sus puertas a las 7:00 de la mañana hora local (6:00 hora de México). Para este proceso la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) habilitó 2 mil 30 “puntos soberanos” en todo el país, con más de 14 mil 400 mesas de votación, y acreditó a 47 mil 272 personas, además de unos 100 mil voluntarios en el territorio. En el extranjero se habilitaron 667 puntos de votación, distribuidos en 602 ciudades de 100 países, entre ellos México, Estados Unidos, Colombia, España y Argentina.
Los votantes del plebiscito, calificado por el gobierno de Maduro como un acto de militancia política, respondieron a tres preguntas. Una apuntaba al rechazo a la Asamblea Constituyente convocada por Maduro; otra, preguntaba si se le demandaba a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana “obedecer y defender la Constitución”, y la última, consultaba si se aprobaba la renovación de los poderes públicos y la formación de un gobierno de unidad nacional.
Las preguntas fueron aprobadas previamente por la Asamblea Nacional (Congreso), que es controlada por una mayoría opositora, con miras a tener un aval popular a sus siguientes acciones contra el gobierno.
A tres horas de que comenzó la jornada, el vicepresidente del Parlamento, el opositor Freddy Guevara, informó que la participación superaba lo esperado, por lo que activaron un plan de contingencia para garantizar que aquellos centros en los que se acabó el material fueran surtidos de nuevo.
Estuvieron presentes como observadores cinco ex presidentes latinoamericanos como representantes de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), entre ellos el mexicano Vicente Fox y el colombiano Andrés Pastrana, quien señaló que si esta consulta demuestra que los venezolanos no están de acuerdo con la Constituyente, Maduro deberá retroceder en esa iniciativa.
También participaron los opositores Leopoldo López y el alcalde metropolitano de Caracas Antonio Ledezma, ambos presos desde 2015 y cumpliendo actualmente arresto domiciliario.
La presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, pidió que no se generen “falsas expectativas” y recordó que la votación no tiene “validez jurídica”. En cambio, defendió el simulacro electoral convocado por el CNE previo a la Constituyente, el cual, aseguró, sirvió para verificar la funcionalidad de la maquinaria electoral.
Al cierre de las mesas de votación, el opositor Freddy Guevara informó que las cifras preliminares indicaban una participación superior a los 5 millones de votantes, de un padrón electoral de 19.8 millones.
El vicepresidente del Parlamento resaltó que la participación fue “espectacular”, pues resultó en una jornada que en la que el pueblo “decidió el camino a la libertad”.
El líder opositor Henrique Capriles dijo que, en vista de la voluntad expresada masivamente por el pueblo, Maduro debería retirar su propuesta de la Constituyente.
Por la noche se informó que las autoridades venezolanas impidieron que los ex presidentes Jorge Quiroga, de Bolivia, y Miguel Ángel Rodríguez, de Costa Rica —que forman parte de la delegación de IDEA— pudieran visitar en su casa al dirigente de oposición Leopoldo López, denunció Lilian Tintori, la esposa del político.
