Más Información
SRE confirma que no hay mexicanos muertos en incendios en California; lamenta fallecimiento de 5 personas
Impactan con proyectos sociales a un millón de personas en 2024: informe; población vulnerable es prioridad
Lenia Batres busca destitución del Comité de Evaluación del PJF; se excedieron en sus facultades, acusa
El reloj que enfrenta a Luisa Alcalde y García Soto: “¿cómo lo consiguió y quién los mandó a hacer?”, cuestionan
Comité de Evaluación del Legislativo califica suspensión de elección judicial de improcedente; continuará proceso
La primera ministra británica, Theresa May, prometió ayer proteger el estatus legal de los ciudadanos de la Unión Europea (UE) tras la salida de Reino Unido del bloque, al considerar que desea “hacer todo lo que podamos para asegurar a los ciudadanos de la UE que han hecho del RU su casa”. El hecho fue criticado por el negociador europeo para el Brexit, Michel Barnier, quien pidió “más ambición, claridad y garantías” sobre la propuesta.
Tal como indicó a los líderes de la UE en Bruselas, May indicó que los europeos con cinco años de residencia en el Reino Unido serán tratados “como si fueran ciudadanos británicos” en cuanto a asistencia sanitaria, educación, prestaciones sociales y pensiones. Sin embargo, no podrán votar, dijo el ministro para el Brexit, David Davis, a la BBC.
En paralelo a la intervención de May en los Comunes, el gobierno publicó un documento en el que detalla la propuesta. La oferta británica subraya que los europeos que hayan obtenido el estatus de “asentados” permanentes tras cinco años de residencia en el país podrán continuar optando a la reunificación familiar tras el Brexit.
El texto puntualiza que todos los ciudadanos europeos en RU, “con independencia de cuándo llegaron”, deberán tramitar un “documento de residencia” ante el Ministerio de Interior, tras el Brexit.
Más temprano, medios británicos informaron que en el documento presentado por May, el Reino Unido contemplaba acelerar la expulsión de los ciudadanos de países del bloque que cometan delitos graves de forma reiterada. La regulación sobre la expulsión se aplicaría a quienes cometan crímenes o causen “problemas de seguridad”.
En respuesta, el negociador del bloque para el Brexit, Michel Barnier, pidió “el mismo nivel de protección que en la legislación de la UE. Más ambición, claridad y garantías [son] necesarias en la posición de hoy de Reino Unido”.
En tanto, el Partido Conservador de May llegó a un acuerdo para formar gobierno con el Partido Unionista Democrático (DUP) de Irlanda del Norte. El pacto no es una coalición, pero le asegura a la premier el respaldo del DUP en cuestiones clave en el Parlamento.