El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, elevó ayer el tono con Venezuela, durante una reunión de líderes de América Latina, presentando al país como un ejemplo de lo que sucede cuando se debilita la democracia e instó a la región a condenar al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
“Sólo necesitamos mirar a Venezuela para ver qué sucede cuando se socava la democracia. El colapso de la otrora rica nación hacia el autoritarismo la ha empujado a la pobreza y ha causado un sufrimiento incalculable al pueblo venezolano”, dijo Pence durante la Conferencia sobre Prosperidad y Seguridad en América Central.
“Debemos todos elevar nuestras voces para condenar al gobierno de Venezuela por su abuso de poder y el abuso de su propia gente, y debemos hacerlo ahora”, añadió.
Maduro respondió desde Caracas y calificó de “despreciables” y “vomitivas” las declaraciones de Pence.
“El vicepresidente de Estados Unidos dio unas declaraciones absolutamente despreciables, vomitivas. Yo leo esto y me provoca náuseas de que un señor que no sabe en el mapa mundial dónde está Venezuela opine de nuestra patria. De los asuntos de Venezuela nos encargamos nosotros”, expresó Maduro en un acto transmitido por la televisión estatal.
“En Venezuela no va a haber intervención gringa. En Venezuela lo que viene es paz, democracia, elecciones, Constituyente”, agregó en referencia al proceso para reformar la Carta Magna convocado por el propio mandatario y que ha caldeado los ánimos en el país.
Aseguró que Venezuela es “campeona” de la democracia porque en 18 años de gobierno bolivariano, ha tenido 20 elecciones. “No hay país en el mundo que se acerque a Venezuela en ejercicio de libertad y número de elecciones en estos 18 años de revolución bolivariana”, aseveró.
En tanto, Human Rights Watch denunció que el Gobierno de Maduro oculta y legitima los abusos que cometen las fuerzas de seguridad durante las manifestaciones opositoras en Venezuela, que ayer cobraron dos vidas más, elevando el número de muertos a 73.
“Quienes están a cargo de fuerzas de seguridad implicadas en los gravísimos abusos que ocurren a diario en Venezuela no están adoptando medidas para prevenir violaciones de derechos humanos ni llevar a los responsables ante la justicia”, acusó José Miguel Vivanco, director para las Américas de la organización.
La organización asegura contar con evidencia que apunta a que miembros de las fuerzas de seguridad venezolanas, incluida la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional Bolivariana, están implicados en abusos graves. Sin embargo, todo indica que las autoridades responsables en el gobierno no sólo no adoptan medidas de prevención, sino que restan gravedad a los abusos o niegan lo sucedido culpando a los manifestantes.
Tan sólo en la jornada de ayer dos jóvenes de 20 años murieron, con lo que ya son 73 los fallecidos en dos meses y medio de manifestaciones.
“Los estudiantes fueron arremetidos por parte de unos colectivos [afines al gobierno] que dispararon”, indicaron autoridades municipales.