La CIA guardó hoy silencio sobre las acusaciones de Corea del Norte acerca de que Estados Unidos y los servicios de inteligencia surcoreanos trazaron un plan para matar a su líder, Kim Jong-un, con sustancias químicas durante las celebraciones del pasado abril en el país asiático.

Al ser preguntado por Efe, un portavoz de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de EU rechazó responder a las acusaciones de Corea del Norte.

El Ministerio de Seguridad Estatal norcoreano aseguró hoy que habían detectado a un grupo infiltrado por la CIA y el Servicio Nacional de Inteligencia de Seúl para realizar "preparativos encubiertos y meticulosos" para atentar contra Kim "mediante el uso de sustancias químicas".

En un comunicado, recogido por la agencia oficial de noticias norcoreana KCNA, el ministerio afirma que la CIA y los servicios de inteligencia surcoreanos "sobornaron" en 2014 a un norcoreano apellidado Kim que trabajada en un complejo industrial en el territorio ruso de Jabárovsk para que cometiera un "atentado terrorista" contra el líder supremo del país.

El objetivo era asesinar al líder norcoreano durante los actos en el Palacio del Sol de Kumsusan (donde están embalsamados su abuelo y su padre, Kim Il-sung y Kim Jong-il, respectivamente) y en el desfile militar.

"Le dijeron que el asesinato con sustancias químicas, incluidas sustancias radiactivas y nanovenenos, era el mejor método, que no requiere acceso al objetivo", con resultados tras seis o doce meses, se indica en el texto.

Los servicios de inteligencia de Seúl asumieron el coste de los suministros y fondos necesarios para la operación y el hombre recibió dos pagos de 20 mil dólares, así como un transmisor-receptor de satélite.

A lo largo de 2016, cuando el hombre residía en Pyongyang, se le facilitaron instrucciones para tener acceso a los lugares de las celebraciones y, además, se le dieron 200 mil dólares para establecer un centro de enlace en el extranjero con el fin de introducir los equipos y materiales necesarios, y para "sobornar a cómplices".

"Le insistieron en que tomara las mejores medidas para examinar y preparar la operación, ya que podría desencadenar un incidente catastrófico, como una guerra", una vez se conociera el origen de la misma, se indica en el comunicado.

En respuesta, Corea del Norte amenazó con lanzar un "ataque antiterrorista" contra las agencias de inteligencia de ambos países por esa supuesta conspiración.

"Vamos a rastrear y destruir sin piedad hasta el último terrorista de la CIA" y la inteligencia de Seúl, según KCNA.

ae

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses