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La milicia terrorista Estado Islámico (EI) reivindicó ayer el atentado perpetrado el viernes contra un autobús en el que viajaban cristianos coptos a través de la agencia de noticias Amaq, que funciona como portavoz del grupo.
Un grupo asociado al EI atacó a los cristianos coptos, señala el comunicado difundido online, que habla, además, de 32 muertos. El gobierno egipcio cifró las víctimas mortales en 29.
El ataque tuvo lugar cerca de la ciudad de Menia, donde un grupo de hombres armados detuvieron el autobús en el que viajaban y dispararon contra los pasajeros, quienes se dirigían a un monasterio de la provincia.
De acuerdo con la información dada a conocer por los supervivientes de la masacre, los hombres enmascarados ordenaron a los cristianos bajar del autobús y renegar de su fe antes de asesinarlos.
“Les pidieron renegar de su fe cristiana, uno a uno, pero todos se negaron”, dijo el padre Rashed.
Explicó que “al parecer los pusieron de rodillas. La mayoría recibieron un balazo en la parte de atrás de la cabeza, en la boca o en la garganta”.
“Los hicieron bajar del autobús, les quitaron el carné de identidad y el oro que llevaban, sus alianzas o sus anillos”, contó también Maher Twafik. Su sobrina sobrevivió al ataque pero no el marido ni la hija de un año y medio de ésta.
En tanto, los familiares de la víctimas celebraron ayer entre lágrimas al menos cuatro funerales en dos provincias del sur cercanas al monasterio de San Samuel.
Ocho de las víctimas fueron enterradas en el mismo monasterio al que se dirigían, informó un testigo. Para el resto de las víctimas se ha creado un nuevo cementerio bautizado con el nombre de “Los Mártires” de Menia.
