Un hombre chino de 39 años de edad permaneció en su casa encerrado durante más de tres décadas porque sus padres creían que estaba poseído, informó el diario ‘South China Morning Post’.
“El hombre, de rostro pálido y cuerpo delgado, vivía en una habitación oscura y húmeda”, apuntó el periódico.
Los padres explicaron que cuando era niño se “volvió anormal”, después de que se escapara a los seis años y fuera llevado por un desconocido a una casa que estaba siendo exorcizada; tras regresar a su hogar —contó su madre— ella y su esposo decidieron encerrarlo, porque empezó a correr por las calles y a robar comida de los vecinos.
La familia reside en la provincia de Guangxi, al sur de China, una zona donde todavía no hay demasiado conocimiento sobre las enfermedades mentales.
La madre indicó que ella y su esposo cuidaban de las necesidades de su hijo, pero no tenían otra alternativa que mantenerlo encerrado en su casa.
Autoridades lo trasladaron a un hospital psiquiátrico.