Honduras recordó hoy el Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia con las advertencias de que unos 280 miembros de la comunidad Lésbico, Gay, Transexual, Bisexual e Intersexual (LGTBI) fueron asesinados en ese país de 2009 a 2017 y de que el 90% de los casos continúa hundido en la impunidad por falta de investigación.
La denuncia, planteada por el (no estatal) Comité de la Diversidad Sexual de Honduras, aseguró que uno de los sectores más perjudicados por ese tipo de violencia es el de los homosexuales, que registran más de 100 muertes violentas en los últimos años.
El Comité, formado por asociaciones y grupos promotores y defensores de los derechos de esa colectividad, calculó que más del 10% de los 8.7 millones de hondureños es parte de ese conjunto de personas, informó hoy el (estatal) Comisionado Nacional de los Derechos Humanos de Honduras (CONADEH).
Los hechos contra los gays, precisó, se han cometido en su mayoría en su domicilio, su trabajo, sus vehículos y en la calle, con armas de fuego y punzocortantes, mientras que otros fueron asfixiados, estrangulados o calcinados.
El hondureño Roberto Herrera Cáceres, jerarca del CONADEH, lamentó que “aún persistan actos de estigma y discriminación” y abogó para que los crímenes “no queden en la impunidad”.
Debe de existir un trato equitativo para todos los habitantes, impedir cualquier “acto estigmatizador o discriminatorio en el país”, prevenir la violencia y las agresiones e “incidir para reducir las muertes violentas que se comenten contra” ese sector de la población, afirmó Herrera, en una declaración que esa instancia remitió a EL UNIVERSAL.
CONADEH aseguró que muchas de las víctimas eran comerciantes, asalariados, propietarios de negocios, estudiantes, trabajadores sexuales, abogados, periodistas, defensores de derechos humanos, conductores de mototaxi, jornaleros, albañiles, vendedores ambulantes y barberos.
La población lésbica también sufre hostilidad, alertó.
“Se estima que desde el 2009 han muerto violentamente unas 23 cuyos cuerpos fueron encontrados en su domicilio, zacateras, cañeras, bajo un puente e inclusive en el mercado. Alrededor de 20 fueron víctimas de las armas de fuego y el resto por arma blanca”, puntualizó.
Casi “un centenar” de transexuales perecieron violentamente y la mayoría en lugares públicos, aseveró.
Los integrantes de la comunidad en Honduras son víctimas de violencia física, psicológica, patrimonial y sexual, en su familia y en ámbitos de educación, salud, trabajo, iglesias e instancias de aplicación del derecho y la justicia, acusó CONADEH. En escenarios educativos, denunció, enfrentan “estigma y discriminación” de maestros y compañeros.
El acoso u hostigamiento escolar o “bullying”, con violencia de los otros alumnos, “es permitido o propiciado en muchos ámbitos educativos por los mismos maestros, ocasionando, en muchos casos, el abandono escolar”, informó.
Herrera advirtió que es “prioritario” prevenir esos actos que “vulneran la dignidad humana”, condenó la homofobia y la discriminación y exhortó al gobierno y al pueblo de Honduras, y “en particular a los familiares”, a que respeten el derecho de esos seres humanos.
Cada 17 de mayo se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia y Transfobia, en coincidencia con la eliminación en 1990 de la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales por parte de la Asamblea General de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La homofobia es la intolerancia y el desprecio hacia quienes tienen una orientación o identidad diferente a la heterosexual y la discriminación se presenta en varios escenarios, como el seno familiar, el campo laboral, los servicios públicos (salud, educación o instituciones bancarias, entre otros), la política, las actividades sociales y las deportivas.