El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el jueves que "algo debería pasar" con Bashar al-Assad tras el ataque con armas químicas en Siria, en una jornada en la que el Pentágono y la Casa Blanca comenzaron a estudiar opciones militares.
Trump, que afronta la peor crisis internacional desde que asumió en enero, sugirió que podría tomar una postura dura contra Assad, aliado de Irán y Rusia y cuyo país ha sido arrasado por seis años de guerra.
"Creo que lo que hizo Assad fue terrible", dijo Trump a periodistas que viajaban junto a él a Florida en el Air Force One. "Creo que lo que pasó en Siria es una desgracia para la humanidad y él está ahí. Él es el que manda, así que algo debería pasar", agregó, sin llegar a pedir que Assad abandone la presidencia.
El ataque del martes en la ciudad de Khan Sheikhoun, dominada por rebeldes, dejó al menos 70 muertos, entre ellos muchos niños. Washington culpa a Damasco por lo ocurrido, una visión que no es compartida por Rusia, que tiene fuerzas en Siria. El Gobierno sirio ha negado estar detrás del ataque.
Hasta ahora, el enfoque de Trump sobre Siria apuntaba únicamente a la lucha contra Estado Islámico. Pero el miércoles, el mandatario republicano dijo que el ataque hizo que volviera a pensar sobre Assad.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, fue más allá. "El rol de Assad en el futuro es incierto, y con las decisiones que ha tomado no habría lugar para él para gobernar Siria", comentó.
En tanto, un funcionario estadounidense dijo que la Casa Blanca y el Pentágono están inmersos en discusiones detalladas sobre las opciones militares en Siria. Mattis y el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, H.R. McMaster, tocaron el tema, agregó la fuente.
Más temprano el jueves, el presidente ruso Vladimir Putin dijo que es inaceptable hacer acusaciones "infundadas" sobre el ataque.