El ministro de Exteriores de China, Wang Yi, advirtió hoy durante una visita oficial a Alemania de la necesidad de evitar por todos los medios una guerra en la península de Corea.
"No vamos a tolerar que exista ni un 1% de probabilidades (de que esto suceda). Corea del Norte no es Medio Oriente. En el caso de que se inicie una guerra en la península de Corea, entonces habrá consecuencias graves e inimaginables. Por eso radica en el interés de China limitar realmente estos riesgos bélicos", alertó el político asiático.
La situación es muy tensa en la región después de que Corea del Norte llevara a cabo el año pasado más de 20 pruebas de misiles balísticos y dos de bombas atómicas.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ya amenazó varias veces con actuar de forma unilateral si China no aumentaba su presión sobre el régimen de Pyongyang.
En medio de las tensiones, el Ejército estadounidense comenzó ayer a construir un controvertido escudo antimisiles en Corea del Sur, tras haber hecho el martes una demostración de fuerza con el envío del submarino nuclear "USS Michigan", que atracó en la ciudad surcoreana de Busan.
Rusia acusó luego a EU del recrudecimiento del conflicto con Corea del Norte. La construcción del sistema antimisiles en Corea del Sur desestabiliza la situación, advirtió el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov.
El viceministro de Exteriores, Serguei Rjabkov, llamó por su parte a Corea del Norte a frenar las pruebas nucleares. La solución del conflicto debe incluir el compromiso de Pyongyang de no llevar a cabo ensayos nucleares, escribió Rjabkov en el diario "Kommersant".
Seúl anunció maniobras conjuntas con un portaviones estadounidenses, que tiene que llegar a la región próximamente.
Washington envió su portaviones nuclear "Carl Vinson" y su flotilla escolta a la península coreana, donde está previsto que llegue a finales de la semana.
"El peligro de que estallen nuevos conflictos en cualquier momento es grande, es por esta razón que pedimos a todas las partes que demuestren sangre fría y eviten cualquier acto o palabra que podrían llevar a nuevas provocaciones", declaró el jefe de la diplomacia china.
"La tarea más urgente es retomar las negociaciones", aseguró Wang en relación a las conversaciones que, junto a las dos Coreas, establecieron Japón, China, EU y Rusia.
El objetivo final para China en este conflicto es la "desnuclearización" completa de la península coreana, afirmó el jefe de la diplomacia china, que deseó asimismo el establecimiento de un "mecanismo de seguridad" de carácter "permanente" en la región.
Mientras tanto, agregó Wang, las partes deben cumplir "estrictamente" con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y aplicar las sanciones económicas impuestas a Corea del Norte por sus últimos ensayos nucleares y de misiles balísticos.
Gabriel, por su parte, destacó el papel de "mediador" de China en el conflicto coreano y apuntó que Washington también está enviando en los últimos días señales en favor de la distensión.
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