Tras la explosión de un coche bomba el sábado pasado al oeste de la ciudad de Aleppo, en donde estaban bloqueados autobuses con miles de evacuados de las localidades de Fua y Kafraya, se volvieron virales ayer las imágenes de un fotógrafo y activista que dejó por un momento su labor para rescatar a las víctimas.
Abd Alkader Habak, fotógrafo y activista, estaba trabajando en Aleppo cuando se registró la explosión, por la cual resultó afectado. Sin embargo, cuando pudo reincorporarse, y al darse cuenta que había personas con vida en los autobuses, decidió ayudar a los lesionados.
“La escena fue horrible, especialmente viendo a los niños lamentarse y morir frente a uno”, comentó el fotógrafo en entrevista a CNN.
Habak narró que el primer menor que ayudó estaba muerto, pero el segundo aún respiraba. “Este niño estaba firmemente sosteniendo mi mano y mirándome”, dijo el activista, quien corrió con él en brazos hasta la ambulancia, en donde lo dejó. No sabe si sobrevivió.
Las fotografías de Abd Alkader Habak fueron difundidas en Twitter por la activista Ala’a Shehabi y el periodista Omar Ghabra, entre otros. Una de las que causó más conmoción fue la de él de rodillas llorando junto al cuerpo de un menor.
El atentado dejó un saldo de 126 muertos, entre los que había 68 niños, de acuerdo con información dada a conocer UNICEF.