Al menos seis personas fallecieron y cuatro más resultaron heridas el lunes por la mañana por un coche bomba en las inmediaciones de un hotel de la capital de Somalia, dijo la policía.
Un suicida hizo estallar el auto cerca del hotel Weheliye, en la concurrida carretera Maka Almukarramah, explicó el capital Mohamed Hussein. Ambulancias acudieron a la zona.
Ningún grupo se atribuyó de inmediato la autoría del ataque. El grupo extremista islámico al-Shabab, vinculado a Al Qaeda, suele atentar contra hoteles en Mogadiscio. Un asalto a un hotel a finales de enero causó al menos 26 fallecidos.
En otro incidente registrado el lunes por la mañana, un suicida detonó un minibús cargado de explosivos a las puertas de un campamento militar en el sur de la capital. El atacante fue abatido y dos personas resultaron heridas, explicó el coronel del ejército somalí Yusuf Burhan. Nadie reclamó tampoco la responsabilidad del incidente.
El nuevo primer ministro del país, Hassan Ali Khaire, condenó las dos acciones diciendo que fueron perpetradas por "grupos sanguinarios".
A pesar de haber sido expulsada de sus feudos en el sur y el centro de Somalia, la milicia radical sigue perpetrando ataques letales en todo el país. En los dos últimos años comenzó a atentar contra puestos de control y bases militares tanto del ejército somalí como de la fuerza multinacional de la Unión Africana.
Al-Shabab supone un gran desafío para el nuevo presidente de Somalia, Mohamed Abdullahi Mohamed, que prometió hacer de la seguridad en este país del Cuerno de África una seguridad. Su débil gobierno central busca ampliar su control más allá de zonas clave como la capital.
lsm