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El discurso de investidura de Donald Trump causó ayer inquietud en Europa, mientras que en América Latina los gobiernos dieron la bienvenida al nuevo presidente estadounidense.
Los líderes europeos mantuvieron la prudencia diplomática, pero fueron los medios de comunicación los que más insistieron en el corte populista, proteccionista, de las palabras de Trump y lamentaron la carga chovinista del lema con el que éste inauguró su mandato: “Desde hoy, América primero”.
Sigmar Gabriel, vicecanciller alemán, criticó “un discurso de tonos altamente nacionalistas”. Entre los mensajes más firmes estuvo el del Papa: “Espero que bajo el liderazgo de Donald Trump, la estatura de Estados Unidos se mida por encima de todo por su preocupación por los pobres, los marginados y los necesitados”.
En Europa, uno de los escasos políticos en felicitar a Trump fue Nigel Farage. Aseguró que el multimillonario dio “un gran discurso para los intereses de Reino Unido”. Theresa May, premier británica, aseguró al Financial Times que en los próximos días le pedirá a Trump que “no mine los valores europeos” y “reconozca la importancia de la OTAN”.
Los dirigentes europeos estuvieron atentos al apartado de política exterior del discurso, en el que Trump abogó por anteponer los intereses estadounidenses al bienestar de los países aliados, insistiendo en que Washington debe demostrar una mayor firmeza en las relaciones exteriores. El presidente de España, Mariano Rajoy, le deseó a Trump “éxito en su gestión, que acierte”.
En Francia, Le Figaro criticó la intervención por parecer “un discurso de campaña más”. Otro de los aspectos destacados en Europa es que el discurso del republicano fue breve, con sólo mil 433 palabras.
Otras reacciones. En Colombia, el presidente Juan Manuel Santos utilizó Twitter y escribió: “Felicitaciones @POTUS Donald Trump. Esperamos mantener y mejorar relaciones. Los intereses estratégicos de Estados Unidos están al sur del Río Grande [Bravo]”.
Desde la cuenta oficial de la presidencia colombiana, indicó: “Queremos construir con Estados Unidos una relación constructiva”.
En Argentina también hubo saludos desde la red social. “Se inicia una nueva etapa en Estados Unidos. Trabajemos juntos”, escribió en su cuenta de Twitter la canciller argentina Susana Malcorra. El presidente Mauricio Macri eligió guardar silencio, lo mismo que la vicepresidenta Gabriela Michetti y la Cancillería.
En Brasil, el Ministerio de Relaciones Exteriores publicó información sobre el nuevo embajador de Estados Unidos, Peter Michael McKinley. En Chile no hubo palabras oficiales, pero la Cancillería publicó, en sus redes sociales, una entrevista del canciller Heraldo Muñoz en la que hablaba de Barack Obama y decía: “La apertura hacia Cuba significó bajar la tensión de Estados Unidos con América Latina”. Muñoz había dicho, cuando Trump ganó las elecciones: “Hay incertidumbre y preocupación”.
