En una serie de comunicados presentados por la Casa Blanca a minutos de la toma de posesión de Donald Trump se emitieron mensajes sobre temas como los tratados comerciales y la construcción del muro.
Sobre este tema, el presidente Trump reiteró su compromiso de construir un muro para detener el paso de los migrantes ilegales así como “detener los grupos criminales y la violencia, así como la distribución de droga en sus comunidades”.
El texto afirma que reforzará las leyes sobre el control de la frontera además de ponerle fin a las “ciudades santuario”, como Chicago, además de finalizar con la “falta de legislaciones asociadas a la migración ilegal”.
La postura oficial de la administración Trump, que indica en el documento, explica que parte del refuerzo a las leyes implica deportar a los migrantes ilegales con registros criminales.
“El primer deber de un gobierno es mantener a salvo a los inocentes y el presidente Donald Trump peleará por la seguridad de cada estadounidense, especialmente, aquellos estadounidenses que no han visto vecindarios seguros en mucho tiempo”, afirma el documento.
También se estableció que la administración Trump dará todo su apoyo a los policías y tendrá como meta reducir el índice criminal.
“Nuestro trabajo es hacer más confortables las vidas de los padres que quieres que sus hijos caminen con seguridad por las calles. O de los adultos mayores que esperan por un autobús. O los pequeños que caminan de la casa a la escuela. Reforzar las leyes significa reforzar la habilidad de los ciudadanos de protegerse a sí mismos.”
cd