Al menos dos prisioneros murieron hoy en un enfrentamiento con la Policía, horas después de haberse fugado de una cárcel de la región metropolitana Curitiba, en el sureño estado de Paraná, confirmaron fuentes policiales.
Los agentes localizaron a cuatro fugitivos en una residencia de la localidad de Quatro Barras, en Curitiba, tras una denuncia anónima, según dijo a Efe la Policía Militar (PM) de Paraná.
Dos de ellos huyeron cuando percibieron la llegada de los uniformados, mientras que otros dos dispararon contra los agentes y fallecieron en un intercambio de tiros.
Un total de 28 reos huyeron el domingo de la Penitenciaría Estatal de Piraquara, en la región metropolitana de Curitiba, tras detonar un explosivo que realizó un agujero en uno de los muros de la cárcel.
La fuga se produjo tan sólo un día después de que 26 presos murieran asesinados en una prisión de la región metropolitana de Natal, capital del estado de Río Grande do Norte, en un supuesto enfrentamiento entre facciones.
Las prisiones brasileñas viven una ola de violencia y tan sólo en los primeros 15 días del año, más de 100 personas han fallecido y más de un centenar han huido de diferentes cárceles del país.
La crisis del sector penitenciario se intensificó el primer día del año con un motín en una penitenciaria de la ciudad amazónica de Manaos en el que 56 presos murieron; siguió con otra rebelión en un centro de detención rural de la misma ciudad con cuatro más y continuó en Boa Vista, capital de Roraima, con al menos 33 detenidos muertos.
El episodio en Manaos supuso la segunda mayor masacre en la historia carcelaria de Brasil tras la ocurrida en 1992 en una casa de detención de Sao Paulo, conocida como Carandiru, en la que murieron 111 reclusos después de la intervención de la Policía Militarizada para retomar el control del ahora extinto presidio.
cfe