El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, se está alejando de su imperio global de negocios mediante la transferencia de todos los activos a un fideicomiso y dejando a cargo a dos de sus hijos, informó uno de sus abogados el miércoles.
Junto con los planes para contratar a un asesor de ética, Trump está tomando medidas para evitar los inevitables cuestionamientos sobre un posible conflicto de interés entre sus negocios y la Presidencia, aunque su abogado insistió en que no estaba obligado a tomarlas.
El republicano Trump, que asumirá el 20 de enero la Presidencia de la mayor economía del mundo, ha estado bajo presión para tomar estas medidas antes de su llegada a la Casa Blanca.
Trump es dueño de una amplia variedad de campos de golf y hoteles en todo el mundo. El abogado, que habló con un pequeño grupo de periodistas bajo condición de anonimato, dijo que todas las ganancias generadas en los hoteles de Trump por gobiernos extranjeros serán donados al Tesoro de Estados Unidos.