La Asamblea Nacional venezolana aprobó ayer una declaratoria de abandono del cargo del presidente Nicolás Maduro por el supuesto incumplimiento de sus funciones, proceso que objetó previamente el Tribunal Supremo de Justicia.
El tribunal había pedido a los congresistas abstenerse de dictar cualquier acto que esté al margen de sus atribuciones constitucionales. La mayoría opositora del Congreso aprobó, por 106 votos en favor, una declaratoria de abandono del cargo de Maduro por estar “al margen del diseño y funciones constitucionales de la presidencia”, señala el texto.
La oposición justificó el proceso contra el mandatario alegando que hay una “grave ruptura del orden constitucional y democrático, la violación de los derechos humanos, la devastación de las bases económicas y sociales de la nación”.
Al final del debate el presidente de la Asamblea Nacional, diputado Julio Borges, hizo un llamado a las autoridades: “Permitan que sea el pueblo venezolano el que pueda con el voto solucionar la grave crisis económica, social y política que padece la familia venezolana”.
“Nada me sacará ni me distraerá de lograr mi objetivo: la recuperación de la economía”, afirmó la víspera el mandatario durante su programa dominical Contacto con Maduro, en el que anunció la creación de un comando nacional que actuará contra los sectores “golpistas y terroristas” del país.