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Si Yolanda Varona, presidenta de la asociación “Dreamers Moms”, tuviera que equipar lo que sintió al enterarse del triunfo del republicano Donald Trump, sería como su deportación.
Es como aquella sensación de ansiedad e incertidumbre que vivió las primeras horas, cuando los agentes de inmigración la separaron de sus hijos y la expulsaron del país donde había vivido muchos años.
Yolanda, presidente la asociación Dreamers Moms que lucha por la reunificación de las madres deportadas, lucha por la unión y no por el separatismo que promulga Trump.
“Estamos de luto, me siento en shock siento que esto no es posible no pensamos que la gente lo iba hacer llegar a la presidencia, es algo triste siento que perdí una batalla”, dice.
Duele por las madres y padres deportados que ante este escenario podrían ver frustradas sus posibilidades para reunirse con sus hijos en Estados Unidos, pero más por los jóvenes soñadores que ahora volverán a manejar con miedo, a estudiar con incertidumbre.
“En la mañana sentí como si tuviera una regresión, realmente siento el mismo pesar que sentí el primer día que salí a México, siento que me regresé que todo este tiempo de lucha de esfuerzo de fe, se murió y se derrumbó”.
¿Cómo exigir al presidente electo que cumpla sus promesas de campaña?, se pregunta, si su promesa fue el racismo, la deportación y el reforzamiento de un muro que divide miles de familias.
Yolanda Varona que explica que actualmente se estima que un millón de mexicanos deportados se encuentran separados de sus familias, tendencia que iría en ascenso ante el triunfo del republicano.
“Pero no podemos dar un paso atrás, ahora más que nunca tenemos que estar fuertes. Aunque sinceramente no estábamos preparados para eso”, admite la activista.