El control del Congreso se decide el martes y los republicanos esperan proteger su estrecha mayoría en el Senado, que depende de un puñado de estados en donde las contiendas no tienen un claro favorito.
Se prevé que los republicanos mantengan control de la Cámara de Representantes, pues se espera que los avances demócratas sean modestos.
En Carolina del Norte y Missouri, los demócratas buscaban sorprender a los arraigados senadores titulares republicanos. En entidades de inclinación demócrata como Wisconsin, Illinois, Nevada, New Hampshire y Pennsylvania, los demócratas intentan relacionar a sus rivales republicanos con Donald Trump.
Los demócratas necesitaban ganar cuatro escaños para tomar la mayoría en el Senado en caso de que Hillary Clinton llegue a la Casa Blanca y pueda enviar a su vicepresidente en caso de un eventual empate. En caso de un triunfo de Trump, necesitarían cinco escaños.
lsm