Tras la histórica victoria de los Cubs de Chicago en la Serie Mundial de beisbol, cientos de personas salieron a las calles de Chicago para celebrar.
Desde el final de la novena entrada, cuando se definió que el partido se iría a extra innings, aficionados salieron a las calles, a la expectativa del resultado.
Tras la victoria, cientos de aficionados comenzaron a caminar e incluso correr rumbo al Wrigley Field, casa de los Cubs.
La policía incluso inició un operativo previo al final del partido, cercando las calles alrededor del estadio, cortando el paso a los autos. El servicio de trenes en la estación Adisson, la más cercana al centro deportivo, suspendió su servicio y los autobuses están siendo desviados por rutas alternas.
Incluso el alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, emitió un comunicado que aseguró que la victoria de los Cubs sobre los Indians de Cleveland "ha unido a la ciudad y a los fanáticos de este equipo alrededor del mundo".
"El que los Cubs de Chicago ganen la Serie Mundial es más que un juego y más que un deporte. Se trata de las familias que han pasado el amor a este equipo por generaciones. Los fans de Cubs jamás se dieron por vencidos pensando que este día era posible. Han hecho historia este año", declaró.
La espera de 108 años llegó a su final esta noche para los Cachorros de Chicago que vencieron en 10 entradas por 8-7 a los Indios de Cleveland en el decisivo Séptimo Partido de la Serie Mundial, que ganaron por 4-3 al mejor de siete.
Por quinta vez en la historia de la Serie Mundial, el Séptimo Partido se tuvo que decidir en extra innings.
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