El presidente electo Donald Trump deberá hablar con la verdad sobre los indocumentados en Estados Unidos, afirmó hoy Los Angeles Times al recomendar que deberá “evitar el uso de falsedades”.
“Trump ha comprado una serie de falsedades y generalizaciones acerca de los roles que varias ciudades y la policía local juegan supuestamente en proteger a los residentes en la aplicación federal de la inmigración”, apuntó.
“La primera víctima en la guerra contra los indocumentados, como en cualquier guerra, es la verdad”, sentenció el considerado diario más importante en el oeste de Estados Unidos.
“Los Ángeles tiene la suerte de tener, en Charlie Beck, un jefe de policía que distingue entre hecho y ficción y reconoce el papel que sus oficiales desempeñan en la protección de la seguridad pública”, destacó.
El jefe Beck declaró que el Departamento de Policía de Los Ángeles no cambiaría sus prácticas actuales, luego que asesores de Trump analizaron sus planes para presionar a la policía local y autoridades carcelarias para que ayuden a encontrar y deportar a residentes que cruzaron ilegalmente la frontera.
Beck ratificó que sus agentes no empezarían a cuestionar a personas sobre su situación migratoria o entregar a sospechosos de bajo nivel de delincuencia que son indocumentados a las autoridades federales.
“El Departamento de Policía de Los Ángeles no es una rama de la Policía de Inmigración y Aduanas, y la policía no se permite ser delegada como agente de inmigración. Tampoco deberían hacerlo”, destacó.
“Desde los años 70, el LAPD ha sabido reconocer que puede proteger mejor la seguridad pública cultivando buenas relaciones con las comunidades que sirve y dando a todos los residentes la seguridad de que pueden hablar con la policía sin temor a ser deportados”, indicó.
Algunos críticos de la inmigración, incluyendo a Trump, se han entregado a una especie de mal juego de la definición bajo la cual marcan a cualquier municipio como una "ciudad del santuario" si no hace el trabajo de inmigración del gobierno federal para él, mencionó el diario.
Eso sería simplemente deshonesto si no fuera por la posibilidad de que la administración de Trump pudiera castigar las ciudades "santuario", al retrasar el financiamiento de la policía federal por supuestamente violar la ley de inmigración, comentó.
Después de haber hecho una campaña basada en el rechazo a la inmigración, Trump ahora tiene mucho que aprender para convertir sus pronunciamientos en políticas que mejoren, en lugar de socavar, la seguridad pública, finalizó el periódico.
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