Bogotá.— Tras cinco años sin verse cara a cara, el presidente colombiano Juan Manuel Santos y el ex mandatario, senador y líder de la oposición, Álvaro Uribe Vélez, se reunieron ayer en la Casa de Nariño y acordaron empezar hoy mismo un posible ajuste al texto del Acuerdo Final con las FARC que fue rechazado por escasos 54 mil votos en el plebiscito del domingo pasado.
Después de casi cuatro horas de diálogo, Uribe dijo a la prensa que manifestó a Santos “ajustes y proposiciones iniciales que deberán introducirse a los textos de La Habana para buscar un nuevo acuerdo de paz que vincule a la totalidad de los colombianos… El presidente de la República expresó voluntad para lograrlo”.
Insistió en el reclamo de que no haya impunidad a los crímenes cometidos por los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ni se les permita acceder a la política a quienes han cometido delitos de lesa humanidad. En cambio, reiteró su propuesta de buscar una amnistía para los guerrilleros que no estén señalados de delitos atroces y su petición de alivios judiciales “para los integrantes de las Fuerzas Armadas”. Se mostró preocupado por “los secuestrados de quienes nada se sabe” y por los “miles de niños reclutados” por las FARC “que no han llegado a sus hogares”. A la vez, pidió a Naciones Unidas “que acompañe esta nueva etapa de la democracia colombiana, porque el resultado del domingo rechazó los acuerdos, pero reafirmó el deseo unánime de paz”,
Santos expresó su voluntad de escuchar a todas las partes, “atender en la medida de lo posible sus observaciones y propuestas de ajuste para encontrar un camino que nos permita no sólo culminar el acuerdo de paz con las FARC, sino fortalecerlo”, indicó.
Explicó que hoy se reunirán las comisiones de ambas fuerzas políticas para seguir avanzando en las negociaciones en esta nueva fase del proceso. “Establecimos que el punto de contacto será el ex comisionado de paz Camilo Gómez y, por parte del gobierno, Frank Pearl y el Ministro de Defensa Luis Carlos Villegas”, dijo. Las comisiones tratarán los temas que los partidarios del “no” rechazan del acuerdo de paz y avanzar hacia una solución que ponga fin al conflicto con las FARC.
La próxima semana Juan Manuel Santos se reunirá con otro de los voceros del “no”, Francisco Santos. El mandatario se mostró optimista. “Estamos muy cerca de lograr la paz, una paz estable, duradera y con un apoyo ciudadano más amplio”, dijo, y pidió celeridad en el proceso.
Antes que con Uribe, el mandatario se reunió con el ex presidente Andrés Pastrana, otro de los opositores del proceso de paz y quien aseguró que “con el ‘no’ se unió a los colombianos. El 99% del país está convencido y estamos con la paz”.
De los acuerdos de paz dijo que “hay cosas buenas que hay por rescatar y otras que hay que implementar”. También pidió que se activen ya las zonas de concentración de la guerrilla para darles protección.
Santos había dicho el martes que la tregua regiría hasta el 31 de octubre, lo que llevó al máximo jefe de las FARC, Rodrigo Londoño, a tuitear: “Juan Manuel Santos anuncia que el cese el fuego con las FARC va hasta el 31 de octubre ¿De ahí para adelante continúa la guerra?”. Poco después, el ministro colombiano de Defensa, Luis Carlos Villegas, aclaró que “la preservación del cese el fuego es del mayor interés para el gobierno, para la seguridad de la población civil, de las FARC y de nuestra fuerza pública. Será prorrogado cuanto sea necesario”.
Estados Unidos mandó ayer a La Habana al enviado especial Bernie Aronson, a solicitud del gobierno de Santos y las FARC. Con la medida el presidente Barack Obama muestra su respaldo al presidente colombiano y mantiene su papel negociador.
La Organización de Estados Americanos (OEA) confió en que la reunión de Santos con Uribe y Pastrana permita hallar “la puerta de la paz”.
Colombianos organizaron una serie de manifestaciones entre miércoles y viernes en distintas ciudades del país para expresar su apoyo al acuerdo de paz con las FARC y al cese del fuego, señaló el diario colombiano El Tiempo.
Los organizadores de las marchas invitaron a quienes votaron “no” el domingo a manifestarse también. “La idea es que participen para que vean que hay voluntad de trabajar conjuntamente: ya no somos los del ‘sí’ y los del ‘no’, sino que somos los colombianos que queremos la paz. No queremos más polarización”, añadieron.