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Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) aprobaron ayer oficialmente el acuerdo de libre comercio con Canadá (CETA), que será firmado mañana, domingo, en Bruselas luego de que se superara el bloqueo interno en Bélgica.
“Misión cumplida! Recién acordamos con PM (primer ministro) @JustinTrudeau realizar cumbre UE-Canadá este domingo”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
El premier canadiense confirmó que participará en la cumbre, que se tenía que haber celebrado el jueves, pero fue suspendida por la negativa de la región belga de Valonia a aceptar la aprobación de Bélgica del acuerdo de libre comercio con Canadá. Tusk y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, firmarán por la UE, según fuentes del bloque. Trudeau lo hará por Canadá.
El Consejo Europeo había confirmado anteriormente el respaldo de los Estados miembros de la UE al CETA. “Me complace confirmar que la UE está lista para firmar el amplio acuerdo económico y comercial con Canadá”, dijo el primer ministro eslovaco, Robert Fico, cuyo país ocupa actualmente la presidencia rotativa del bloque.
Previamente, el Parlamento de la región de Valonia, con 3.6 millones de habitantes y que se resistía fuermente al acuerdo, dio su visto bueno al gobierno de Bélgica para la firma del pacto, al considerar que se lograron suficientes garantías en la negociación de declaraciones adjuntas.
Entre otras cosas, logró que Bélgica solicite opinión al Tribunal de Justicia de la UE sobre la “compatibilidad” con los tratados comunitarios del mecanismo de tribunales previsto en el CETA para dirimir los conflictos Estado-inversor al margen de los sistemas nacionales de Justicia.
El CETA apunta a eliminar las barreras comerciales y facilitar el flujo de bienes entre Canadá y la UE. Valonia temía que el acuerdo pudiera debilitar los estándares sociales y ambientales, amenazar el modo de vida de los agricultores y dar un poder desmedido a las corporaciones.
El CETA es visto como una prueba de cara a un acuerdo más grande y controvertido que la UE negocia con Estados Unidos, el Tratado Transatlántico de Comercio e Inversiones (TTIP por sus siglas en inglés).