El paro general de 12 horas convocado ayer por la oposición venezolana se cumplió a medias en Caracas, pues tanto las entidades bancarias como varios comercios y oficinas abrieron sus puertas, aunque las principales vías presentaron menos tráfico que un día normal.
Además, algunos ciudadanos consultados por EFE señalaron que si no trabajan “no comen” y otros indicaron que debían pedir autorización para faltar a su lugar de trabajo.
El paro fue convocado por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) como parte de la agenda de protestas por la suspensión del proceso para activar un referéndum para revocar al presidente Nicolás Maduro. En su cuenta de Twitter la MUD escribió que “las amenazas del gobierno no intimidaron a la ciudadanía”. Los diputados opositores Rafael Veloz y Juan Andrés Mejías calificaron de “exitosa” la jornada cívica. En contraste, el presidente Nicolás Maduro afirmó que 95% del país trabajó normalmente y consideró un “fracaso” la huelga.
El Tribunal Supremo favoreció ayer a Maduro, al dictaminar que nació en el país y no posee una segunda nacionalidad, algo que la Asamblea Nacional estaba evaluando. Maduro, a su vez, dijo que demandará a la Asamblea por “violar la Constitución” al abrirle juicio político.
El mandatario acude hoy a la 25 Cumbre Iberoamericana que se celebra en Cartagena de Indias, Colombia. Ayer los empresarios reunidos allí para el XI Encuentro Empresarial Iberoamericano expresaron su “profunda preocupación” por la situación venezolana que, dijeron, “pone en riesgo la iniciativa empresarial”, por lo que pidieron a Maduro un diálogo “constructivo” con el sector privado.
El presidente mexicano Enrique Peña Nieto dijo que la Cumbre Iberoamericana se centrará en el tema educativo, lo cual no quiere decir que el tema de Venezuela se vaya a abordar . “No es un foro político... aquí hay mucha inquietud sobre el tema de Venezuela... lo que convoca este foro y este espacio es especialmente el tema educativo”, dijo.